A una empresa implicada en el desfalco de Corelca le siguen dando contratos en Ecopetrol

En 2013, Luis Orlando Barragán Gómez fue capturado para que respondiera ante la justicia por los delitos de concierto para delinquir, prevaricato, falsedad en documento público, peculado y cohecho. Poco después, ese mismo año, un juez tumbó la medida de aseguramiento y el empresario aprovechó la oportunidad para salir del país sin dejar rastro.

La decisión del juez, a su vez, fue revocada meses más tarde y el Juzgado Quinto Penal de Cartagena ordenó –en marzo de 2016– emitir una circular roja de Interpol contra Barragán.

En mayo de ese año, Barragán fue capturado en Venezuela. Sin embargo, el empresario negó ser colombiano y exhibió documentos de identidad que lo acreditaban como oriundo del vecino país.

Luego de una controversia jurídica, la Sala de Casación Penal del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela declaró improcedente la solicitud de extradición hecha por la justicia colombiana, argumentando que Barragán era venezolano.

Marlon Díaz, abogado de Barragán, le dijo a CAMBIO que la orden de captura de su cliente le fue revocada posteriormente y que en 2018 el empresario volvió al país.

Corelca y el caso contra Luis Orlando Barragán

Barragán enfrentó, sin embargo, un juicio como autor intelectual y material del despojo a 63 familias de un predio ubicado en el sector de Mamonal, en Cartagena.

Los hechos tuvieron origen en 1998, época en la que la Corporación Eléctrica de la Costa Atlántica (Corelca) extendió sus redes en varios municipios de Bolívar sobre predios cuya propiedad y posesión estaban en manos de particulares.

Corelca no indemnizó en su momento a dichas familias, las cuales acudieron ante la justicia, que ordenó pagarles, en indemnización, 14.000 millones de pesos. Corelca ofreció, a cambio, entregarles un lote valorado en 18.000 millones de pesos.

Por una serie de argucias jurídicas, el lote no llegó a manos de los despojados, sino que terminó en poder de Conequipos, de propiedad de Barragán. Por este caso fueron vinculados más de 30 integrantes del poder judicial, entre los que se encontraban jueces, notarios y registradores de instrumentos públicos.

Marlon Díaz, abogado de Barragán, le contó a CAMBIO que hace un mes la Fiscalía le solicitó al juez del caso la prescripción de los delitos contra Barragán. El juez aceptó dicha solicitud, a excepción del delito de peculado. Barragán sigue en juicio y su defensa insistirá en que también se declare la prescripción del peculado.

Los contratos con Ecopetrol

Mientras tanto, Conequipos, a pesar de haber sido protagonista de millonarias reclamaciones contra Ecopetrol, se ha dado el lujo de seguir contratando con ella.

En noviembre de 2003, un laudo arbitral de la Cámara de Comercio de Bogotá obligó a la petrolera colombiana a pagar 788 millones de pesos a favor de un consorcio del que hacía parte Conequipos, por desequilibrio económico en el contrato.

Más tarde, entre 2014 y 2021, la firma –que ahora tiene como representante legal al hijo de Luis Orlando Barragán– suscribió cinco contratos con Ecopetrol, por más de 569.000 millones de pesos; el último, a través de la transportadora de hidrocarburos Cenit, por un valor de 16.726 millones de pesos. Dicho contrato se encuentra actualmente suspendido.

Un consorcio del que también parece hacer parte Conequipos suscribió otro contrato con Ecopetrol para la realización de unas obras mecánicas en el municipio de Acacías, Meta. De dicho contrato no hay evidencia en el Secop. Sin embargo, CAMBIO encontró una orden de pago de mayo del año pasado.

Aunque no hay condena contra Barragán ni sanciones contra la empresa, llama la atención que una firma envuelta en gruesos escándalos de corrupción y en reclamaciones contra la petrolera siga siendo beneficiada con millonarios contratos.