“Tú no sales de aquí Danilo, hasta que no firmes lo acordado”: habitante de Tibú, Norte de Santander

Crédito: Archivo Particular

“Tú no sales de aquí Danilo, hasta que no firmes lo acordado”: habitante de Tibú, Norte de Santander

El Alto Comisionado de paz llegó tarde a la reunión acordada para el cese al fuego y vivió momentos de tensión cuando llegó a la instalación de la mesa de negociación. Varios habitantes lo encerraron para exigir que se anunciara el cese de operaciones de las Fuerzas Militares.

Por: Redacción Cambio

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El acto de instalación de la mesa de diálogos y el inicio del cese del fuego entre el Gobierno y el Estado Mayor Central, disidencias de la Farc, estuvo a punto de truncarse por la demora del Alto Comisionado para la Paz de llegar al municipio de Tibú en Norte de Santander.

Luego de varias reuniones de última hora, en la mañana del domingo 8 de octubre, los dos equipos llegaron hasta el municipio de Tibú, Norte de Santander. La ceremonia estaba prevista para las nueve de la mañana, pero fue aplazada hasta el mediodía por el anuncio del cese al fuego.

En medio de actos culturales y discursos de líderes que habían llegado de varias regiones del país, los asistentes vieron que en la mesa principal no estaba presente el Alto Comisionado para la Paz.

La demora en su llegada llevó a una reunión de los delegados de la guerrilla que recibieron una llamada de alias Iván Mordisco, en la que ordenó levantarse y salir del lugar por la falta de compromiso por parte del Gobierno Nacional.

A la una de la tarde, la camioneta que transportaba a Danilo Rueda llegó al polideportivo, donde lo esperaban varios integrantes de la comunidad que comenzaron a increpar al comisionado, amenazándolo de que si no firmaba el cese bilateral no podía salir del lugar. “Tú no sales de aquí Danilo, hasta que no firmes lo acordado”. Esa frase llevó a una rápida reacción de sus escoltas para evitar que fuera golpeado.

El alto funcionario permaneció durante varios minutos al lado de un camión, hablando con los habitantes y realizando llamadas por su teléfono celular para dar los últimos detalles del documento conjunto de acuerdo para avanzar a un cese bilateral.

Luego de varios minutos, y en compañía de Camilo González Posso, jefe del equipo negociador del Gobierno, se dio inicio al evento, que terminó con la decisión de que el cese al fuego bilateral comenzaría desde la medianoche del lunes 9 de octubre, mientras se espera la promulgación del decreto presidencial antes del domingo 16 de octubre, cuando cesarían las operaciones militares.

mesa de negociación

El dilema del cese al fuego 

La discusión inició desde la misma noche del viernes 6 de octubre, en un hotel en Cúcuta, donde se encontraban reunidos el  Alto Comisionado para la Paz, Danilo Rueda; el jefe de equipo negociador, Camilo González Posso, ylos demás representantes del Gobierno. Allí discutieron cuáles serían los puntos esenciales de un primer borrador para cesar operaciones con el grupo ilegal.

El documento fue revisado por el ministro de Defensa, Iván Velásquez, junto a la cúpula militar. Ellos le hicieron varias recomendaciones y lo enviaron, en la mañana del sábado 7 de octubre, para que fuera discutido con los representantes del Estado Mayor Central.

El principal motivo de discusión entre el Gobierno y la disidencia era que el cese tenía que presentarse en todo el país. En específico pedían detener la llamada Operación Trueno, en la que las Fuerzas Militares ellevan cinco meses en el Cañon del Micay tratando de tener el control del municipio El Plateado, zona rural de Argelia, en el departamento del Cauca. Las partes habían acordado acabar con las operaciones allí en su última reunión, acontecida el 19 de septiembre, luego de una serie de acciones por parte del grupo ilegal contra varias instalaciones militares.

 

La propuesta presentada por el equipo negociador del Gobierno era realizar un cese al fuego escalonado, en cuatro partes, que comenzara en el Catatumbo, para continuar en una segunda fase en Putumayo y Caquetá, seguir en el Magdalena Medio y Guaviare, y terminar en el Cauca, en marzo de 2024.

La propuesta tuvo una fuerte respuesta del grupo negociador del Estado Mayor Central: “El documento del Gobierno llega luego de la firma de Playa Rica, contiene resaltados en amarillo que tardarían varios días, probablemente hasta semanas, para concretarlo, lo que deja en duda la realización de la instalación de la mesa el 8 de octubre, porque en lo acordado en Playa Rica es que para el día de la instalación de la mesa debe estar el decreto de cese al fuego”, dijeron en un comunicado publicado en redes sociales.

El mismo alias Iván Mordisco se pronunció sobre ese tema: “Sin decreto de cese al fuego no hay instalación de mesa, Gobierno debe cumplir lo acordado”, afirmó en respuesta a un trino del expresidente Ernesto Samper, en el que le hacía una petición al presidente Gustavo Petro: “debería decretar ya el cese al fuego (…). Dilatar el cese es mantener abiertas las puertas para que el conflicto siga cobrando víctimas inocentes de acciones inhumanitarias en las zonas de guerra”.

Luego de varias horas de discusión se llegó al acuerdo de firmar un cese de operaciones por parte de las disidencias, a la espera del decreto presidencial para detener las acciones ofensivas de las Fuerzas Militares. 

El anunció tomó por sorpresa a los altos mandos de las Fuerzas Militares, que citaron con urgencia una reunión en la noche del domingo 8 de octubre, en la cual analizaron el comunicado conjunto para identificar cuáles eran la nuevas órdenes.

Este lunes, 9 de octubre, fue citada una nueva reunión del consejo de seguridad nacional entre el presidente Petro, el ministro de Defensa y la cúpula militar, para ser enterados de los acuerdos y conocer el decreto que incluiría detener la Operación Trueno en el Cauca.

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