¿Por qué el Gobierno busca un presupuesto tan alto en 2025 si está recortando el de 2024?

Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda.

Crédito: Colprensa.

8 Noviembre 2024 11:11 am

¿Por qué el Gobierno busca un presupuesto tan alto en 2025 si está recortando el de 2024?

El ministro de Hacienda confirmó que la disminución de este año podría llegar a los 33 billones de pesos. Mientras tanto, aseguró que el Gobierno presentará el decreto para el próximo año por 523 billones.

Por: Laura Lucía Becerra Elejalde

Entre aquí para recibir nuestras últimas noticias en su WhatsAppEntre aquí para recibir nuestras últimas noticias en su WhatsApp

El Gobierno nacional está en una encrucijada presupuestal. Faltan menos de dos meses para que se acabe el año y la ejecución del presupuesto de 2024 va lenta. El Ministerio de Hacienda evalúa si necesita recortar el presupuesto de este año. Mientras tanto, sigue embolatada la aprobación del presupuesto de 2025, que deberá ser por decreto luego de que el Congreso no le dio luz verde. 

El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, confirmó que en los próximos días la cartera presentará un decreto para recortar hasta 33 billones de pesos del presupuesto de este año porque no alcanzaron los ingresos para cubrirlo.  

“En mayo se hizo una suspensión del presupuesto dado que se encontró que las cifras de recaudo esperadas no coincidían con las reales. Hoy ya sabemos que ese recaudo no se va a conseguir. Ese decreto de suspensión que fue por 20 billones ahora hay que volverlo un decreto de recorte efectivo”, aseguró Bonilla en declaraciones a medios. 

El ministro dijo también que ese decreto tiene que salir este mes de noviembre y que el Gobierno está examinando, dadas las dificultades de recaudo, si el recorte se extiende hasta los 33 billones de pesos.

billetes
El Gobierno por ahora tiene 20 billones de pesos 'congelados' en el presupuesto de 2024. Crédito imagen: Freepik. 

¿Es suficiente ese recorte? 

Para algunos expertos, el ajuste del cinturón debería ser más severo para cuidar las finanzas públicas. Según el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana, debido a una caída en los ingresos del Gobierno “producto de una mala programación fiscal y el bajo desempeño de la economía”, y para cumplir la regla fiscal, el Gobierno debería recortar 30 billones adicionales a los 20 que ya había congelado en mitad de año.

De igual forma, el exviceministro de Hacienda y director y jefe de estrategia para América Latina de XP Investments, Andrés Pardo, el recorte debería ser de alrededor de 45 o 50 billones para cumplir con las proyecciones que tiene el Gobierno de déficit fiscal de este año, que se estima en 5,6 por ciento del PIB. 

Según Pardo, los ingresos por impuestos a septiembre registraban una caída de 8,2 por ciento en comparación con el año anterior, que equivalen a por lo menos 34 billones por debajo de la meta para lo que va del año. 

“Lo más probable es que la reducción total del gasto resulte de una combinación de tres factores: el monto oficialmente recortado por decreto, que actualmente es 33 billones, pero probablemente sea mayor; la subejecución del gasto de inversión; y la gestión activa de efectivo, incluido un aumento de cuentas por pagar y pagos atrasados”, explicó Pardo. 

Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, dijo que no pueden presentar el presupuesto por debajo del monto que se radicó. Crédito imagen: Ministerio de Hacienda.  

¿Cómo va la ejecución del presupuesto en 2024? 

El presupuesto de 2024 cuenta con 503,5 billones. Estos son los recursos apropiados, o aprobados por el Congreso para que el Gobierno disponga de ellos para los gastos de la economía. 

Para entender cómo se ejecuta el presupuesto, es necesario contemplar cuatro elementos: las apropiaciones o esos montos máximos de gasto autorizados en el presupuesto para los sectores y diferentes rubros; los compromisos que se adquieren con esas apropiaciones; las obligaciones, que son los recursos que se adeudan para el desarrollo de esos compromisos, y los pagos, que son, valga la redundancia, los dineros que se pagan dentro de ese ciclo presupuestal. 

Con corte a octubre, Hacienda anunció que los compromisos acumulados llegaron a 364,1 billones y superaron el 72,3 por ciento de las apropiaciones vigentes del presupuesto, mientras que la ejecución, que el Gobierno mide por las obligaciones, llegó a 316,8 billones, lo que representa el 62,9 por ciento del presupuesto de este año. Los pagos, por otro lado, están en 312,6 billones, el 62,1 por ciento del presupuesto. 

“La ejecución presupuestal de 2024 está en las cifras de compromisos en 72 por ciento, ejecutado el 63 por ciento y pagado el 61 por ciento. La diferencia entre el compromiso y la obligación está en el presupuesto de inversión donde lo que se compromete en un determinado momento tiene que esperar varios meses para que tenga el producto listo a recibir y pagar”, aclaró el ministro Bonilla.  

¿Qué pasa con el presupuesto de 2025? 

El presupuesto se define por vigencia fiscal, es decir, año a año y es una autorización de gasto dada por la ley que debe utilizarse en la respectiva vigencia. Una vez terminado el año se pierde esa autorización de gasto. Por eso si quedan recursos sin comprometer, el Gobierno deja de contar con esos recursos hacia adelante. 

El presupuesto de 2025 ha tenido varios problemas para su aprobación y se definirá por un decreto del Gobierno. Este año, por primera vez desde la Constitución de 1991 no se logró aprobar el monto en el Congreso. El Gobierno radicó un proyecto por 523 billones, de los cuales 511 están financiados y se necesita una reforma tributaria por 12 billones para cerrar las cuentas.

El Congreso decidió no aprobar el presupuesto por considerar que estaba desfinanciado y agotó los tiempos de ley que tenía para ello. Bonilla aseguró que el presupuesto de 2025 que tiene que decretar será por 523 billones. 

“No podemos decretar nada distinto al presupuesto que se radicó ante el Congreso y esperamos el trámite del proyecto de ley de financiamiento para saber qué queda financiado”, dijo también el ministro. 

El Observatorio Fiscal de la Javeriana reconoce que la ley de financiamiento es necesaria “debido a que el tamaño del gasto para el próximo año es muy difícil de disminuir”. El grupo de académicos explicó a CAMBIO que la mayoría del gasto público es inflexible u obligatorio debido al crecimiento de gastos de funcionamiento.

En ese contexto, para no hacer recortes muy grandes en la inversión pública, el Gobierno necesita recursos para balancear el presupuesto”, aclaró el Observatorio. 

Desde que el Gobierno presentó el proyecto del presupuesto general de 2025, varios expertos recomendaron reducir el monto. El centro de estudios económicos Fedesarrollo llamó la atención en su momento sobre la estimación de ingresos tributarios para el próximo año, que es de 316,5 billones. La entidad señaló que esa proyección presentaba una diferencia de 26,6 billones con el estimado del propio Gobierno en el marco fiscal de mediano plazo (MFMP), que se había publicado un mes antes. 

“Hay un riesgo alto de que estos ingresos adicionales no se materialicen, ya que 12 billones tendrían que provenir de una reforma tributaria que podría afectar aún más la recuperación económica, y los restantes 14,6 billones no parecen tener una fuente confiable”, dijo el presidente de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, en ese entonces. 

El Gobierno defiende que no puede cambiar el monto, una realidad es que el presupuesto es poco flexible y gastos de funcionamiento fijos y compromisos de deuda que se deben cumplir. Varios expertos han alertado que los ingresos estimados para el próximo año podrían estar sobreestimados y puede que no se alcancen. Falta ver si en el presupuesto de 2025 se terminan haciendo los mismos ajustes que se están haciendo para el de este año. 

Conozca más de Cambio aquíConozca más de Cambio aquí