Enfriamiento récord del océano Atlántico: ¿a qué se debe y cuáles serían los efectos?

Un estudio de la Universidad de Utrecht en Países Bajos encontró que el océano Atlántico está experimentando un descenso en el nivel de su temperatura superior a los registrados desde 1982. De acuerdo con la investigación, el enfriamiento récord del océano podría generar múltiples consecuencias en el clima global. 

“Ninguna medida de adaptación realista podrá hacer frente a unos cambios de temperatura tan rápidos como los registrados en los últimos meses, con los que se generará un enfriamiento más rápido del hemisferio norte”, concluyó la investigación de la Universidad de Utrecht. 

Además, los investigadores han atribuido el enfriamiento del Atlántico al deshielo que se produce en Groenlandia por cuenta de los efectos del cambio climático. “Este fenómeno oceánico podría provocar un cambio abrupto en la circulación de las corrientes marinas que regulan el clima de Europa y otras regiones del mundo”, se plantea en el informe de la investigación. 

Cambios en la temporada de lluvia y la formación de huracanes: consecuencias del enfriamiento del Atlántico

La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA), por sus siglas en inglés, reveló que el enfriamiento rápido del océano Atlántico se intensificó en los más recientes meses del 2024.  

La agencia científica encargada de monitorear las condiciones de los océanos y la atmósfera encontró que, durante el último año, gran parte del Atlántico Norte había sido extremadamente cálido. De hecho, en los meses de febrero y marzo la temperatura oceánica alcanzó unos 30 grados centígrados. 

Sin embargo, desde inicios de junio, la temperatura superficial del agua del Atlántico ecuatorial central ha estado entre los 0,5 y 1 grado centígrado por debajo del promedio. “Un cambio de esta intensidad en tan poco tiempo, nunca se había observado en la región”, aseguró la NOAA en su reporte oficial. 

El enfriamiento del océano Atlántico puede tener un impacto significativo en la intensidad de los huracanes, cambios en sus patrones de formación e incluso modificaciones en su trayectoria. La Organización Meteorológica Mundial prevé que diferentes países de Europa experimentarán un descenso en su temperatura, mientras que los cambios en los patrones de precipitación en selva amazónica generarán problemas en el ecosistema.

Finalmente, la NOAA aseguró que las condiciones atmosféricas y oceánicas han preparado el escenario para una temporada de huracanes extremadamente activa durante el segundo semestre de 2024 que podría estar entre las más activas de la historia.