Crédito: Fuerza Aérea Colombiana
El Kfir, el cachorro de león que ha protegido a Colombia por más de cuatro décadas
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Los Kfir han sido la punta de lanza de la Fuerza Aérea Colombiana para realizar operaciones contra los grupos ilegales, garantizar la soberanía en las fronteras, detectar aeronaves del narcotráfico e incursiones de aeronaves extranjeras al espacio aéreo.
Por: Javier Patiño C.
En Colombia, la historia de los Kfir, que en hebreo significa 'cachorro de león', inició a finales de la década de los ochenta durante el gobierno del presidente Virgilio Barco con la compra de 12 Kfir C.2 y 1 kfir TC2, aeronaves de combate que habían sido operadas por el ejército israelí. Para vendérselos a Colombia fueron repotenciados y quedaron en una versión C7, más modernos y con la posibilidad de reabastecerse en vuelo, tener equipos de aviónica y sistemas de armas.
Estas aeronaves de combate fueron diseñadas por el mossad –inteligencia israelí– que obtuvo los planos originales de la casa matriz francesa que fabricaba los Mirage 5. Los usaron para diseñar una nave más ágil para operaciones militares.
Entre las mejoras que se le hicieron fue incorporar una mejor versión del motor de la casa General Electric, que le daba mayor velocidad en su peso y mayor desplazamiento.
En su momento, los Kfir pusieron a la Fuerza Aérea Colombiana a la vanguardia en la región, pues podían contar con un equipo para la defensa de las fronteras y para operaciones especiales contra los grupos ilegales.
Un éxito que llevó a que, en febrero de 2008, el ministro de Defensa del presidente Álvaro Uribe, Juan Manuel Santos, comprara otros 13 aviones Kfir y solicitara repotenciar los 11 con los que ya contaba el país.
¿Qué distingue a los Kfir?
De acuerdo con el portal webinfomil, el último modelo adquirido por Colombia y que actualmente realiza sus labores de seguridad es el Kfir C.10, un nuevo rediseño sobre la base del anterior Kfir C.7.
“La cabina incluye una mira sobre el panel de control HUD mejorado, dos nuevas pantallas planas multifunción a color de 4,4 pulgadas (127x177 mm), mostrándose la información del nuevo radar en la pantalla izquierda, mientras que la derecha normalmente presenta parámetros de vuelo”, afirma el portal.
La aeronave también cuenta con un panel frontal de control y apoyo para el sistema de información en el casco del piloto, un radar con capacidad para misiones de combate aire-aire o misiones de ataque aire-tierra para lanzar los misiles infrarrojos Rafal Python.
En la actualidad, Colombia es el único que opera estas aeronaves en el mundo. Esto deja al país a la deriva por la falta de mantenimiento de los aviones, la cantidad de horas de vuelo que acumulan y una cuenta regresiva: los Kfir llegarán al final de su vida de uso cuando termine 2024.
Para un excomandante de la Fuerza Aérea, que pidió reserva de su nombre, para septiembre solo quedaron en uso ocho aeronaves de combate porque las otras ya están ingresando a los hangares al cumplir sus horas de vuelo.
El futuro del poder aéreo de Colombia
Ante la pronta obsolescencia de los Kfir, se suma que, para el Gobierno, renovar la flota aérea no es prioridad. La posibilidad de tener nuevas aeronaves entra en una fuerte turbulencia.
Comprar aviones de guerra va en contravía del discurso del presidente Gustavo Petro, que le apuesta más a la paz total. Además, los problemas de mantenimiento se acrecientan tras la ruptura de relaciones con el gobierno de Israel.
Ante la posibilidad que los Kfir no puedan volver a despegar, el comité técnico que ha buscado nuevas aeronaves espera que el Gobierno revise la carpeta con las ventajas y desventajas de los tres modelos que podrían ser adquiridos por Colombia.
Las empresas que han sido preseleccionadas son la sueca Saab, la francesa Dassault Rafale y la estadounidense Lockheed Martin.
¿Qué aviones podrían reemplazar a los Kfir?
El Grippen sueco
La empresa Saab, de Suecia, ofrece 16 aviones Grippen a 1.900 millones de dólares. Estos Grippen cuentan con equipos de detección de calor y radar de última tecnología. Saab tiene fábrica en Brasil, lo cual facilita el mantenimiento, el envío de repuestos y la capacitación de pilotos a bajo costo. Según información de su oficina de prensa, el valor de la operación por hora de vuelo es de 7.900 dólares.
Pueden ser entregados en 24 meses y no requieren de adecuaciones en la base aérea de Palanquero, donde permanecerían.
El Dassault Aviation francés
El Dassault Rafale, de origen francés, especializado en defensa aérea, es mucho más caro. Cada uno cuesta aproximadamente 200 millones de dólares; de manera que los 16 saldrían en 3.200 millones de dólares. Cuenta con equipos de interdicción aire-tierra, disuasión nuclear y la posibilidad de abastecerse en el aire. La hora de vuelo sale en 28.000 dólares. La fábrica tardaría 60 meses en entregarlos.
El Lockheed Martin estadounidense
El consentido de la casa estadounidense Lockheed Martin es el F-16, con gran capacidad de combate y facilidad de mantenimiento. La aeronave tiene un costo de 170 millones de dólares, con un costo de operación de 12.000 dólares la hora de vuelo y un tiempo de entrega de dos meses.
Es una de las aeronaves más conocidas en el mundo de la aviación de guerra por su autonomía de vuelo. También está adecuada para ser abastecido en el aire.
Un panorama difuso, porque el proceso de negociación, compra y fabricación de las nuevas aeronaves podría tomar más tiempo del que les queda a los Kfir, lo que abre una ventana nada prometedora: la posibilidad de que solo un nuevo Gobierno estudie la viabilidad de adquirir los aviones de combate.
