El general (r) Mario Montoya no aceptó imputación de la JEP por falsos positivos y pidió anular decisión

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El general (r) Mario Montoya no aceptó imputación de la JEP por falsos positivos y pidió anular decisión

El general (r) Mario Montoya, señalado de pedir a sus subalternos "carrotancados de sangre" no aceptó la imputación que la Jurisdicción Especial para la Paz hizo por los falso positivos en Antioquia. Siete exmilitares sí aceptaron haber participado en los delitos de lesa humanidad y crímenes de guerra.

Por: Redacción Cambio

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El excomandante del Ejército y de la cuarta Brigada, general (r) Mario Montoya, no aceptó la imputación que la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) hizo en su contra por los falsos positivos en el departamento de Antioquia durante 2002 a 2003. 

Según W Radio, por medio de un memorial corto Montoya le expresó al organismo su posición y el rechazo hacia los cargos de más de 130 homicidios, convirtiéndose en el segundo exmilitar, después del coronel (r) Iván Darío Pineda en no aceptar la imputación. 

Cabe señalar que siete militares retirados, que de nuevo fueron imputados, aceptaron su responsabilidad en crímenes de guerra y lesa humanidad por las muertes ilegítimas presentadas como bajas en combate. 

Los uniformados en cuestión son el coronel (r) Julio Alberto Novoa Ruiz, los subtenientes (r) José Alejandro Ramírez Riaño, Diego Germán Guzmán Patiño, y Edwin Leonardo Toro Ramírez; también los tenientes coroneles (r) Emerson Antonio Castañeda Morales y Nelson Enrique Carvajal Chisco y el soldado Óscar Iván Mayo Marulanda.

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¿Por qué están imputando a Montoya?

Según la JEP, la Brigada IV habría ejercido una intensa presión sobre los uniformados por obtener resultados, consolidando la peligrosa noción de que el único indicador de éxito en sus operaciones era la presentación de "muertes en combate", lo que habría influido en que se cometieran los falsos positivos. 

Cabe señalar que este enfoque se instauró como requisito para obtener recompensas e incentivos y se atribuye al comandante de la Brigada durante los años 2003 y 2004, el general Mario Montoya. 

El tribunal reveló que el general retirado recurrentemente solicitaba una cantidad de "litros", "chorros", "ríos", "barriles" o "carrotancados" de sangre como parte de estas presiones. 

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