Exintegrantes de las Farc advierten que acciones de la JEP llevarían a firmantes a regresar a las armas

Esta semana se conoció que fueron citados nueve antiguos miembros de las extintas Farc ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) para rendir versión los días 12 y 13 de agosto por el atentado al Club El Nogal, ocurrido el 7 de febrero de 2007, en el que fallecieron 36 personas y otras 198 resultaron heridas. Tras recibir esta notificación, un grupo de firmantes del acuerdo de paz escribió una carta al presidente Gustavo Petro en la que denuncian "graves alteraciones" al Acuerdo Final de Paz por parte de la JEP.

“A pesar de nuestro cumplimiento con relación a la jurisdicción nos preocupa el empeño de la JEP por alejarse del espíritu y la letra de lo acordado, haciendo sus propias interpretaciones a un texto que es claro en sus propósitos de paz, dado el carácter político del Acuerdo que firmamos con el Estado, pretendiendo llevarlo a un terreno judicial punitivista, más propio de un sometimiento a la justicia”, se lee en la misiva.

Rodrigo Londoño Echeverry, Julián Gallo Cubillos y Joaquín Gómez, antiguos miembros de las extintas Farc, hacen parte del grupo de remitentes de esta carta y de los citados por el caso del Club El Nogal. A ellos se suman las firmas de otros exmiembros de esta guerrilla: Jaime Alberto Parra, Pablo Catatumbo, Pastor Alape y Rodrigo Granda.

Este grupo de siete firmantes reclama que en la JEP se está abriendo paso la idea de dictar resoluciones por cada macrocaso, a pesar de que la ley estatutaria de la jurisdicción establece que debe haber una resolución única de conclusiones, "lo que vulnera de manera grave la seguridad jurídica de los comparecientes, especialmente en lo referente al principio de legalidad".

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Así mismo, afirman que, en la SENIT 4 sobre la deserción manifiesta, el tribunal de la JEP estipula que, ante el presunto incumplimiento grave de un compareciente en sus obligaciones, el juez de este tribunal podrá expulsarlo sin que se adelante un proceso de incidente de incumplimiento al régimen de condicionalidad.

Según los firmantes, esto conlleva a la vulneración del derecho constitucional al debido proceso y a la presunción de inocencia, pues se le niega la posibilidad al compareciente de controvertir con pruebas esa acusación.

También denuncian que, de un total de 4.485 solicitudes de amnistía tramitadas por la JEP, tan solo 688 han sido concedidas y 3.804 han sido negadas, lo que representa "un riesgo" para el Acuerdo Final de Paz.

“Es evidente la restrictividad con la que ha venido funcionando el sistema, lo que genera falta de confianza y un alto grado de incredulidad, además de ser violatorio del principio consagrado en el DIH que obliga a los estados, al final de las hostilidades, otorgar la amnistía más amplia posible”, continúa la carta.

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Además, aseguran que hay una vinculación "cada vez mayor" de exintegrantes de las Farc en las escalas media y baja del mando, a indagaciones sobre hechos específicos del conflicto.

“Es contrario a la idea de centrar el esfuerzo en los casos más representativos que constituyen patrones de conductas violatorias del DIH y los Derechos Humanos, lo que ha disparado las alarmas frente a la seguridad jurídica del conjunto de firmantes del Acuerdo, provocando desconfianza en los mismos”. 

¿Regreso a las armas?

De acuerdo con los firmantes, estaría provocando la decisión de los firmantes y comparecientes apartarse de los compromisos del acuerdo y el incremento de firmantes que están regresando a las armas.

“De persistir la idea de incumplir lo acordado entre las partes en materia de justicia, por parte de la JEP, se estaría llevando a los firmantes y comparecientes a apartarse de las decisiones proferidas por esta jurisdicción, por ser abiertamente contrario al espíritu del Acuerdo Final de Paz. Ya algunos aseguran que la JEP en este momento es la principal causante del aumento de las filas de los grupos armados ilegales y de la violencia”, señala la carta. 

Por último, el grupo de firmantes le solicitó a Petro un espacio en su agenda.