¿Cuál es el problema con la línea de crédito del FMI que tiene inquieta a Colombia?

La semana pasada se celebraron en Washington las reuniones de primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, una reunión anual a la que asisten los ministros de Hacienda, banqueros y otros representantes de los 191 países que conforman el organismo. 

Entre los asistentes estaba el ministro de Hacienda colombiano, Germán Ávila, quien viajó junto a sus dos viceministros, Carlos Emilio Betancourt y Marta Juanita Villaveces, y el director de Crédito Público Javier Cuéllar. Aunque en este espacio se habló sobre la estabilidad financiera global y la deuda pública, a Colombia no le fue tan bien al término de las reuniones. 

El sábado, el FMI, entidad liderada por Kristalina Georgieva, emitió una breve declaración en la que mencionaba que estaba revisando la continuidad de Colombia en su línea de crédito flexible, un instrumento creado por el FMI para proveer financiamiento anticipado y flexible a países que consideran sólidos en términos económicos y fiscales, y al cual tiene acceso Colombia desde 2009, cuando se creó el mecanismo. 

¿Por qué el FMI está revisando el crédito flexible de Colombia? 

Desde que se creó esta línea de crédito, Colombia ha firmado diez acuerdos con el FMI y solo ha usado los recursos una vez, en 2020, en plena pandemia. 

Hace un año, el 26 de abril de 2024, el FMI renovó la línea de crédito para el país por 8.100 millones de dólares para un lapso de dos años. Cuando se aprobó esta renovación, una de las condiciones que se establecieron fue una revisión a la mitad de dicho periodo para evaluar su continuidad. 

En su momento, el exministro de Hacienda Ricardo Bonilla dijo que la decisión del FMI era “un voto de confianza por la solidez del país en sus fundamentales y política económica” y “un seguro adicional contra riesgos externos que ayudará a mantener la credibilidad en Colombia". 

Colombia es uno de los pocos países del mundo que han tenido acceso a esta línea, junto con México, Chile y Marruecos. Perú anteriormente tuvo acceso, pero su acuerdo expiró el año pasado y el país no lo renovó. Según el FMI, este instrumento se creó para apoyar a países con marcos de política macroeconómica muy sólidos, un historial de políticas prudentes y un favorable desempeño a nivel institucional. Es una especie de tarjeta de crédito que solo les dan a los países con buenas credenciales de riesgo y credibilidad. 

Ahora, la portavoz del FMI, Julie Kozack, comentó en una declaración pública que la continuidad de Colombia a esta línea de crédito “está sujeta a la consulta vigente del artículo IV y a la revisión de mitad de periodo para la línea de crédito flexible”.

El Capítulo IV es como se conoce a la visita anual que hace el FMI a sus países miembros en la que analiza la situación de cada país y luego presenta un informe con conclusiones. En Colombia dicha consulta comenzó hace cerca de tres meses y al día de hoy continúa en proceso. Este es uno de los puntos que ha llamado la atención sobre el proceso de este año. 

Daniel Velandia, director ejecutivo de investigaciones y economista jefe de la entidad financiera, llamó la atención sobre la “inesperada prolongación” del proceso de consulta del artículo IV, que suele terminar en marzo de cada año. “Esta vez ha sido diferente debido al difícil escenario externo actual y a las preocupaciones fiscales internas”, comentó el experto en un análisis sobre el escrutinio que está haciendo el FMI frente al país. 

Este año el equipo del FMI ha realizado dos visitas a Colombia, a mediados de febrero y a principios de abril. De hecho, el pasado 18 de abril, el exjefe de la misión para Colombia, Ceyda Oner, y el actual jefe de la misión para Colombia, Ding Ding, emitieron un comunicado en el que llamaron la atención sobre la situación de las finanzas públicas del país. 

Si bien en dicha comunicación el equipo del organismo internacional celebró los mejores resultados de crecimiento y el control de la inflación en Colombia, también llamó la atención por la situación de las finanzas públicas nacionales: “El déficit fiscal y la deuda pública se han incrementado más de lo esperado”, señalaron en la comunicación, en referencia al aumento a 6,7 por ciento del PIB que registró el déficit fiscal al cierre del año pasado y el aumento de la deuda a 61,3 por ciento del PIB.  

Los líos para Colombia si le congelan la línea de crédito  

El ministro de Hacienda cuestionó que algunos "opinadores" han afirmado que se ha cerrado el acceso de Colombia a la línea de crédito flexible y aseguró que esto no es cierto. 

"Esta es una línea de crédito que el Fondo Monetario Internacional ofrece a muy pocos países con un adecuado manejo macroeconómico y fiscal. En Colombia esa línea se revalidó en 2024 por dos años, incluyendo una revaluación al año, que es lo que está sucediendo en este momento", dijo Ávila.

Aunque por ahora la línea de crédito no está “suspendida”, para varios expertos el mensaje del FMI es negativo. 

Durante CAMBIO de TEMA, el programa de CAMBIO, Felipe Campos, gerente de Inversión y Estrategia de Alianza Valores y Fiduciaria, comentó también que la situación con la línea de crédito flexible del FMI es por ahora una situación “más que todo reputacional”, aunque aseguró que no es un tema menor. “Esto es como una tarjeta de crédito gold que uno espera no tener que usar”, sugirió. 

El exviceministro de Hacienda y actual director de estrategia macro de XP Investment, Andrés Pardo Amézquita, aseguró que el anuncio del FMI “constituye una nueva alerta sobre el creciente deterioro en el manejo de las finanzas públicas en Colombia, y subraya la urgencia de que el Gobierno presente un plan de ajuste de gasto que sea creíble y sostenible”.  

Una recomendación similar es la de José Ignacio López, presidente del centro de estudios económicos Anif. En su visión, el Gobierno debe presentar un plan fiscal “creíble” pues la situación fiscal se está deteriorando y proteger el acceso a la línea de crédito flexible es “crucial”. 

“La línea de crédito flexible es más eficiente que acumular reservas y envía un mensaje positivo a los mercados. Perder este acceso incrementa el riesgo del país, incrementa los costos de financiamiento y le pone presiones de devaluación al peso colombiano”, comentó. 

Pero no solo los analistas ven con preocupación esta situación. El exministro de Hacienda y de Comercio José Manuel Restrepo publicó en su cuenta de X varios mensajes con relación al tema, y aseguró que esta decisión del FMI no es una buena noticia para Colombia porque “la línea ha sido siempre un respaldo y confianza en la política macroeconómica” que ayudaría a respaldar eventualmente al país en una situación coyuntural difícil como sucedió en la pandemia.