Oxxo: la cadena de tiendas que sigue abierta cuando las demás han cerrado

Las letras blancas sobre el fondo amarillo y rojo de la palabra Oxxo distinguen a una de las cadenas de tiendas de conveniencia más emblemáticas del continente americano. Cada día, parece que hay un nuevo local de Oxxo en cada esquina de las 36 ciudades y municipios de Colombia en los que tiene presencia. Esta es la historia de una empresa cuyas raíces se hunden en el mundo de la cerveza mexicana. En una saga que se remonta a más de un siglo atrás.

La multinacional fue fundada en la ciudad de Guadalupe, en el estado mexicano de Nuevo León, por el grupo cervecero Cuauhtémoc Moctezuma, un conglomerado con una historia más extensa, pues nació de la fusión de dos cervecerías: Cuauhtémoc y Moctezuma.

Las raíces cerveceras de la cadena de tiendas

Todo comenzó en 1874, cuando el destino reunió a tres visionarios: José de la Encarnación Calderón Penilla, un soñador e industrial mexicano, y los empresarios Isaac Garza Garza y José A. Muguerza. Unidos por una fuerte amistad y un espíritu emprendedor, el trío pronto se encontró con José María Schnaider, un maestro cervecero cuya experiencia sería crucial para sus ambiciones. Juntos, concibieron la idea de fundar una cervecería que marcaría el inicio de una nueva era en la industria mexicana.

En 1890, sus sueños se materializaron con el nacimiento de la Cervecería Cuauhtémoc. Trágicamente, Calderón Penilla no llegó a ver el fruto de sus esfuerzos pues falleció un año antes de la inauguración. Sin embargo, su legado perduró en el espíritu innovador de la empresa.

Mientras tanto, en la pintoresca ciudad de Orizaba, otro capítulo de esta historia se estaba escribiendo. En la bulliciosa estación del ferrocarril, los amigos Enrique Mantey y Guillermo Haase fundaron en 1894 la Cervecería Guillermo Haase y Cía. Apenas dos años después, la empresa dio un salto cualitativo al convertirse en sociedad anónima, y renació como la Cervecería Moctezuma.

A medida que el siglo XX avanzaba, ambas cervecerías crecieron y prosperaron por separado. Sin embargo, el destino tenía otros planes. En 1985, Valores Industriales (Visa) adquirió la participación mayoritaria de Cervecería Moctezuma. Poco después, ante varios desafíos financieros, tomó la decisión estratégica de fusionar Moctezuma con Cuauhtémoc.

De esta fusión nació el grupo cervecero Cuauhtémoc Moctezuma, una potencia en el mercado mexicano que no tardó en diversificar sus operaciones. Fue así como, en la década de los setenta, en la ciudad de Guadalupe, Nuevo León, el grupo dio vida a un nuevo concepto: Oxxo.

Los primeros pasos de Oxxo

En sus inicios, este establecimiento se concibió como un escaparate dedicado principalmente a exhibir y comercializar la cerveza producida por el grupo, complementando su oferta con una selección de botanas y cigarros. Sin embargo, el paisaje comercial de México estaba a punto de experimentar una transformación radical.

A medida que la sociedad avanzaba, también lo hacían sus hábitos de consumo y expectativas. Los clientes ya no se conformaban con horarios limitados y una oferta reducida; anhelaban una experiencia de compra más completa y flexible, que se adaptara a los ritmos acelerados de la vida moderna.

Con una aguda visión de mercado, los directivos percibieron en esta creciente demanda no un desafío, sino una oportunidad para reinventar su modelo de negocio. Fue así como emprendieron un audaz proceso de innovación y expansión.

Gradualmente, Oxxo comenzó a ampliar su catálogo de productos, incorporando una variedad cada vez más amplia de artículos de primera necesidad, alimentos frescos, y productos de uso diario. Paralelamente, extendieron sus horarios de atención, y se convirtieron en muchos casos en la única opción disponible para compras de último minuto o en horas poco convencionales.

El modelo de negocio fue avanzando y en 1994 Oxxo dejó de ser una simple extensión de la Cervecería Cuauhtémoc Moctezuma y se convirtió en una empresa independiente bajo el paraguas del grupo Fomento Económico Mexicano S.A.B. de C.V. (Femsa).

La internacionalización y la primera parada en Colombia

Tras cimentar su éxito en el mercado mexicano, Oxxo emprendió una ambiciosa fase de expansión. Esta vez, sin embargo, el objetivo no era diversificar su oferta de productos, sino ampliar su huella geográfica más allá de las fronteras nacionales. Con los años llegó a Chile, a Perú y hasta Brasil, y en Colombia comenzó en 2009.

CAMBIO habló con Andrés Morales Maldonado, director general de Oxxo Colombia, quien compartió sus perspectivas sobre las razones estratégicas que llevaron a la multinacional a incursionar en el mercado colombiano. Además, ofreció una visión detallada de los desafíos y logros que marcaron los primeros años de operación de Oxxo en el país cafetero. 

“Colombia y México son dos países en los que vimos un mercado con muchas similitudes. Al analizar a los consumidores, y pensando en la expansión a diferentes países de Suramérica, decidimos iniciar con una prueba piloto en 2009 y abrir nuestras primeras tiendas en Bogotá. Inicialmente, estuvieron en zonas universitarias y de oficinas, y posteriormente se ampliaron a sectores residenciales”, explicó el director. 

La marca tuvo todo un plan detrás para adaptarse al mercado nacional que se desarrolló en tres etapas: primero, un estudio profundo del consumidor local; segundo, la adaptación de su oferta de servicios; y tercero, una expansión acelerada con ubicaciones estratégicas. Este enfoque, que lo llevó a establecer más de 20.000 tiendas en México, se convirtió en la base de su crecimiento en Colombia.

“Como resultado tuvimos una buena acogida, especialmente entre clientes jóvenes, estudiantes y oficinistas, quienes necesitaban soluciones rápidas a sus necesidades cotidianas. Por otro lado, vimos una opinión favorable respecto a nuestra oferta de valor continua (24/7)”, añadió Morales. 

Los desafíos principales que sortearon fue entender el mercado y al mismo tiempo establecer colaboraciones con autoridades locales para garantizar el adecuado desarrollo empresarial, una estrategia que posteriormente les serviría para fomentar el cuidado de la compañía con la innovación e inclusión social. 

“A la fecha, en base a nuestra estrategia de Justicia, Equidad, Diversidad e Inclusión (JEDI) hemos hecho formación en rutas inclusivas a auxiliares y encargados, apalancándonos de Oxxo Academy. Igualmente, estamos trabajando en la inclusión laboral para personas con discapacidad intelectual y en talleres enfocados en el lenguaje inclusivo”, explicó el ejecutivo de la compañía.  

Un ambicioso plan de expansión 

Morales recientemente compartió con entusiasmo la apertura de la tienda número 500 en el país, un hito que es solo el comienzo de un plan mucho más ambicioso para la empresa en suelo colombiano.

“Tenemos proyectado a mediano plazo llegar a más de 3.000 tiendas. También, queremos ampliar nuestra oferta en nuevas ciudades y municipios y consolidarnos y expandirnos en los territorios donde tenemos presencia”. 

El directivo también delineó la estrategia que impulsará esta expansión: un plan meticuloso y multifacético. "Nuestra hoja de ruta se basa en un conjunto sólido de acciones tácticas y estratégicas, todas ellas concebidas desde el ADN mismo de Oxxo", explicó. 

Morales concluyó su visión con una nota de optimismo y confianza en el capital humano de la empresa. "creemos en nuestra gente como principal motor de crecimiento y en el apalancamiento en procesos claros y transparentes que puedan ser replicables.", afirmó.

Así como Oxxo logró conquistar México, la cadena de tiendas de conveniencia se ha sabido mover en Colombia en los últimos 15 años. Sus característicos letreros rojo y amarillo parecen cada vez más parte del paisaje urbano, y aunque el origen de esta cadena remonta a una cervecería mexicana, hoy es una empresa que se ha convertido en parte de la vida cotidiana de muchos colombianos.