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La historia detrás del 8M: ¿por qué se conmemora y no se celebra?
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El 8 de marzo de 1908, en Estados Unidos, se llevó a cabo una de las primeras manifestaciones de mujeres para exigir el derecho al voto y mejores condiciones laborales. Más tarde, la fecha se estableció como una conmemoración a las luchas por igualdad de género.
Por: Redacción Cambio

Es común que todas las fechas especiales se etiqueten como "celebraciones", pero cuando se trata del Día Internacional de la Mujer, la verdad es que no hay muchas razones para considerarlo como una celebración, sino más bien como una conmemoración a la lucha que mujeres, a veces denominadas "rebeldes", que inició desde finales del siglo XIX.
Este día es una oportunidad para reconocer a las mujeres y sus contribuciones en la vida económica, política, social y cultural, así como para reflexionar sobre las desigualdades que aún persisten y continuar luchando por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres.
La historia detrás del 8 de marzo
Este día tiene sus raíces en importantes eventos y movimientos sociales que tuvieron lugar a principios del siglo XX. Bajo el eslogan "pan y rosas", el pan que representaba seguridad económica y las rosas una mejor vida, el 8 de marzo de 1908, en Estados Unidos, se llevó a cabo una de las primeras manifestaciones de mujeres para exigir el derecho al voto y mejores condiciones laborales en mujeres, especialmente en la industria textil.
En la conferencia internacional de mujeres socialistas celebrada en Copenhague en 1910, Clara Zetkin propuso la idea de establecer un día específico para reconocer la lucha de las mujeres trabajadoras a nivel mundial. Esta propuesta condujo a la designación del 8 de marzo como fecha conmemorativa.
Un momento crucial en esta lucha fue el trágico incendio ocurrido el 25 de marzo de 1911, en la fábrica Triangle Shirtwaist Co, ubicada en el edificio Asch en Washington Place en Nueva York.
La compañía era conocida por las condiciones laborales abusivas a las que estaban sometidos sus trabajadores, en su mayoría mujeres inmigrantes jóvenes.
El incendio comenzó en el octavo piso de la fábrica, donde se almacenaban telas y materiales altamente inflamables. Las puertas de salida estaban bloqueadas o cerradas, y las escaleras de incendios eran inadecuadas para evacuar rápidamente a los trabajadores.
Ante el rápido avance del fuego, las trabajadoras se vieron atrapadas en el edificio. Algunas optaron por saltar desde las ventanas para intentar escapar de las llamas, pero muchas murieron en el acto o resultaron gravemente heridas debido a la altura del edificio.
Como resultado murieron 146 personas, de las cuales 123 eran mujeres, en su mayoría inmigrantes italianas o judías.
Más tarde, en 1975, la ONU institucionalizó oficialmente el 8 de marzo como un día mundial para conmemorar la lucha en torno a temas relacionados con el derecho al trabajo digno, la protección de la integridad de las mujeres y la igualdad de trato sin importar el género.
