"La enmienda fue muy equivocada y hay que corregir": las voces críticas de la reforma a la educación en el Congreso

La ley estatutaria de la educación está a un debate de pasar la prueba en el Congreso. Sin embargo, cuando se pensaba que era la muestra de que la conciliación podía permitir el avance de las iniciativas gubernamentales, la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) convocó a un paro indefinido porque se oponen al texto conciliado con Cambio Radical y Centro Democrático. 

Fecode señala que lo aprobado el pasado 5 de junio en la Comisión Primera del Senado “choca rotundamente con el espíritu de ley estatutaria de educación pactado en los acuerdos suscritos entre el Gobierno y Fecode”.

Así, insisten en que el articulado tiene “modificaciones abiertamente neoliberales y regresivas”. Esto, porque “un enfoque mixto de la educación, aperturándola a las lógicas del mercado, habilitando claramente la privatización y mercantilización de la misma, bajo el pretexto del mejoramiento de la calidad y la falacia de la participación”. 

Las voces opositoras en el Congreso 

Las consideraciones de Fecode ya tienen respaldo en el Congreso, incluso entre congresistas del Pacto Histórico, la coalición de Gobierno que celebró hace unos días la conciliación de la reforma a la educación. 

Alfredo Mondragón, representante a la Cámara del Pacto Histórico, aseguró que acompaña la decisión de las organizaciones de maestros y jóvenes universitarios de “rechazar la enmienda que tuvo la ley estatutaria de la educación, por cuanto desconoce las luchas históricas por las cuales han estado reivindicando. Se tiene que buscar que la educación sea, verdaderamente, un derecho fundamental y no quede como un eufemismo”, dijo. 

La representante Jennifer Pedraza, del Partido Dignidad y quien fue líder estudiantil, aseguró que el proyecto “no transforma la cotidianidad de la educación en ninguno de sus niveles, pero ahora sí eleva a derecho fundamental todas las apuestas privatizadoras del Centro Democrático, con el aval del ‘Gobierno del Cambio’”. 

El senador Ariel Ávila, de la Alianza Verde, considera que, si el Gobierno no mantiene los acuerdos con el Centro Democrático y Cambio Radical, “la reforma está prácticamente hundida”. Esto, porque los cambios que pide Fecode “no los van a aceptar los partidos y el Ejecutivo no tiene las mayorías para pasar el articulado”.

La senadora María José Pizarro, del Pacto Histórico, fue una de las que celebró la conciliación de la reforma a la educación. Ella menciona que, así como es necesario defender los puntos claves, también es importante lograr acuerdos. 

“Destaco la importancia de la movilización convocada. Tengan claro que desde esta curul estamos y estaremos del lado del movimiento estudiantil y profesoral, respaldando sus justas demandas. Nuestro lugar es la defensa de los puntos elementales que permitan avanzar en el diálogo para aprobar una ley de educación que sea coherente y recoja sus luchas históricas, nos moveremos bajo ese propósito también en la discusión en plenaria y la conciliación”, dijo Pizarro. 

Por su parte, la ministra de Educación, Aurora Vergara, aseguró en una rueda de medios que “no se está estableciendo una salida rotunda ni radical. El Gobierno ha sido respetuoso de los procesos de diálogo y movilización. Lo que se ha planteado es la construcción de consensos, porque retirar el proyecto exige también una votación. Es fundamental que se puedan tomar decisiones acerca de escuchar, respetar y reconocer la movilización y que, de manera ideal, el Congreso y el magisterio permitan llevar la educación hacia el futuro”.