Gobierno y ELN: con cese al fuego y participación de la sociedad llevan el diálogo a un punto histórico

Desde la mañana de este 3 de agosto se desarrolló en Corferias, al occidente de Bogotá, un evento multitudinario en el que el Gobierno Nacional y la guerrilla del ELN dieron inicio a 180 días de cese al fuego bilateral después de arduos meses de negociación en Venezuela, México y Cuba. Al acto histórico llegaron el presidente Gustavo Petro, varios ministros, congresistas, comandantes del ELN encabezados por Pablo Beltrán, los negociadores delegados de ambas partes, líderes gremiales, sindicales, representantes de víctimas, indígenas, negros, miembros de la comunidad LGTBIQ+, en fin, habitantes de esa Colombia profunda de la que muy poco se sabe en la capital. Además, se presentó el Comité Nacional de Participación, una instancia que recogerá las propuestas de la sociedad civil y las llevará a la mesa de diálogo.

Desde hace más de dos meses, el Gobierno y el ELN culminaron el tercer ciclo de los diálogos y dieron inicio al alistamiento de los protocolos para hacer posible el cese al fuego bilateral que comienza hoy. Además, se inició la carpintería del Comité Nacional de Participación instalado el 2 de agosto y presentado al día siguiente. Del equipo negociador del gobierno, harán parte del Comité: Iván Cepeda, Dayana Domicó (lideresa indígena), el coronel retirado Álvaro Matallana, Nigeria Rentería y Rodrigo Botero, experto en medioambiente y director de la Fundación para la Conservación y el Desarrollo Sostenible (FDCS). En representación ELN están: Consuelo Tapias, Aureliano Carbonell, Mauricio Iguarán, Claudia Rodríguez y Juan Carlos Cuéllar.

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Y en representación de la sociedad civil está Germán Arce, presidente del Consejo Gremial, Bruce Mac Master, presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), Oscar Sánchez, líder de la Unión Sindical Obrera, Percy Oyola, dirigente de la Central General de Trabajadores, Yolanda Perea, lideresa afro, entre otros.

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"Ratificamos nuestro respaldo y compromiso indeclinable en participar activamente en la tarea que tiene el Comité Nacional de Participación", dijo Oscar Sánchez.

Por su parte, Yolanda Perea aseguró que "hoy hay una esperanza de construir una paz que tenga el rostro de mujer, una paz donde nuestros jóvenes, niños y niñas no sigan siendo asesinados. Una paz que nos permita entender que es necesario poder construir en medio de esas diferencias una igualdad social". Resaltó que la paz "no es la ausencia de guerra". Justamente, uno de los detalles significativos de la jornada fue el ingreso prioritario a Corferias para mujeres e indígenas. Además, en la seguridad del evento tuvouna importante participación la Guardia Indígena y la Guardia Cimarrona.

Una de las intervenciones más simbólicas fue la del líder ganadero José Félix Lafaurie, históricamente vinculado con la derecha y esposo de la senadora uribista María Fernanda Cabal. Lafaurie integra desde el año pasado la delegación del Gobierno en la mesa de diálogo con esa guerrilla. "Estamos en un momento clave para la historia del país, pero lo será aún más si en 180 días estamos reunidos nuevamente para prorrogar el acuerdo de cese al fuego bilateral", manifestó, y agregó: "esto no es una celebración sino un pacto de supervivencia: hay que devolverle a Colombia la fe perdida". Nada que ver con las férreas críticas que años atrás hizo Lafaurie al proceso de paz con las Farc que llevó a cabo el gobierno de Juan Manuel Santos.

Histórica también fue la intervención de Maria Consuelo Tapias, integrante de la delegación del ELN, quien les dio las "gracias a los militares, generales, policías y soldados. A las iglesias y comunidades basadas en la fe (...) A todos les pido que persistamos en este proceso de diálogo", agregó Tapias y señaló que "tenemos que ser eficaces y concretar hechos de paz, parar las amenazas y muertes de líderes en los territorios".

En representación de la Iglesia Católica asistió monseñor Héctor Fabio Henao, quien insistió en la importancia de ser perseverantes para mantener el diálogo a pesar de las dificultades que presenten en el proceso. “Tenemos que perseverar en el diálogo en Colombia. Insistir en el valor de la palabra", aseguró Henao, y pidió "tener paciencia para lograr una paz que nos permita vivir de una manera respetuosa".

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El presidente Gustavo Petro fue uno de los últimos en intervenir y en su discurso aprovechó para resaltar el carácter histórico del evento:

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"Hay que dar una felicitación: nunca jamás en la historia contemporánea el ELN había llegado a esta posición: hablar de frente en el corazón de Colombia, sin dejar de ser el ELN, sin armas, ante la diversidad de Colombia, ancha y profunda, ante el Estado de Colombia, en el cual ha librado una guerra que se remonta desde el año 1964", dijo el jefe de Estado.

Petro también hizo énfasis en la importancia de la reforma agraria como un asunto pendiente por implementar del acuerdo de paz firmado con la extinta guerrilla de las Farc. “¿Qué estamos esperando para que ese primer punto del acuerdo se vuelva realidad? Tres millones de hectáreas fértiles en manos del campesinado de Colombia”, dijo el presidente. 

Por su parte, el jefe negociador del ELN, Pablo Beltrán, destacó la importancia de la participación de la sociedad civil en los diálogos, como nunca antes había ocurrido en los fallidos intentos del pasado. "Para nosotros es histórico porque desde hace muchas décadas hemos dicho que esto no lo resuelve un diálogo de dos (Gobierno y guerrilla), para los problemas de Colombia es insuficiente (...) que la élite se suba al cambio", expresó el jefe guerrillero. Es la primera vez, en décadas, que el segundo al mando del ELN está en Bogotá, en el centro del poder del país, participando en un evento con el alto gobierno. Otty Patiño, jefe negociador del Gobierno, también mostró una postura similar a la de Beltrán: “la participación de la sociedad es tan importante como los acuerdos a los que se llegue”.