Elecciones 2023: Las ambiciones del primo de Verónica Alcocer por ganar la gobernación de Sucre

Antes de la llegada de Gustavo Petro a la Casa de Nariño, Mario Fernández Alcocer solo era conocido en Sucre, su departamento de origen y donde ha hecho toda su carrera política. Con el Gobierno del “cambio” en el poder, Fernández se convirtió en la sombra de la primera dama y ahora es uno de los candidatos más influyentes para las elecciones de octubre.

A finales de 2022, Fernández Alcocer empezó a generar suspicacias por ser invitado VIP a varios eventos de Gobierno y codearse con ministros y otros altos funcionarios. El primo de la primera dama sostuvo diálogos informales con Alfonso Prada cuando era ministro; con Catalina Velasco, titular liberal de la cartera de Vivienda; Cielo Rusinque, directora del Departamento de Prosperidad Social, y hasta directivos de la Aerocivil. Todo en nombre del lobby –se supone– para gestionar atención gubernamental en Sucre. 

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"No nos confundan"

La influencia de Fernández quedó a la vista de la opinión pública cuando este año, en pleno Carnaval de Barranquilla, se bajó de la misma camioneta en la que venían el presidente Petro y su esposa Verónica Alcocer. Consultado por CAMBIO sobre su relación con el político sucreño, el jefe de Estado reveló las afinidades políticas de la mayoría de la familia de la primera dama.

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“¿Ese señor (Mario Fernández) ha sido condenado? (...) Él no es que sea amigo mío, es familiar de mi esposa. Él es Alcocer, yo soy Petro. La vida política de ellos es muy conservadora y muy diferente a la mía, es diferente, no nos confundan (...) En su gran mayoría esa familia es uribista y obviamente yo soy como un mosco ahí. En general, esa familia nunca tuvo hechos de corrupción en la historia de Sucre. Es más, mi suegro, que murió en 2012 y era casi que fascista, fue quien me estimuló a hacer las investigaciones contra el paramilitarismo”, dijo Petro en marzo pasado.

Justamente, uno de los principales cuestionamientos que se le hace a Fernández Alcocer es su presunta relación con grupos paramilitares. En 2014, la Fiscalía archivó una investigación en su contra por presuntos nexos con el sanguinario paramilitar Rodrigo Mercado Peluffo, alias Cadena. Dicha investigación fue archivada porque los investigadores no pudieron demostrar la cercanía entre el político y el jefe paramilitar.

Pero las sombras sobre posibles relaciones entre el primo de la primera dama y grupos paramilitares volvieron a aparecer en 2016, cuando un denunciante de nombre Carlos Arturo Rueda señaló al político sucreño de haberse reunido con varios jefes paramilitares en 2006, en Santa Fe de Ralito. Según el denunciante, Fernández Alcocer se habría reunido con Jorge 40, aseveración que el político negó a través de un comunicado. A la fecha, las denuncias en su contra por nexos con grupos al margen de la ley no han prosperado y solo han quedado en investigaciones.

Mario Fernández: la gestión humanitaria como plataforma política

Aunque hasta ahora Fernández empezó oficialmente a hacer campaña para las elecciones de octubre, su candidatura ya estaba lanzada desde el año pasado, cuando hábilmente aprovechó la gestión del Gobierno en la ola invernal en regiones como La Mojana sucreña y el suroccidente del Atlántico. Entre noviembre y diciembre de 2022, Verónica Alcocer se apersonó de la entrega de ayudas humanitarias en el Caribe, apalancada en los 2,1 billones de pesos entregados a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) para atender la emergencia invernal. Lo anterior fue gracias a la declaratoria de desastre natural que hizo el presidente el primero de noviembre del año pasado.

Sin ser funcionarios públicos, la primera dama y su primo recorrieron varias regiones afectadas, se acercaron a las comunidades para entregarles los kits de emergencia en nombre del Gobierno y, de paso, empezaron a construir un capital electoral prometedor.

Las correrías con su prima en labor humanitaria posicionaron desde principios de 2023 a Fernández Alcocer como una figura cercana no solo a la política tradicional de Sucre sino al alto Gobierno. De esta manera comenzó a gestarse una variopinta coalición entre el Partido Liberal, el Pacto Histórico y Cambio Radical alrededor de la candidatura de Fernández a la Gobernación.

Fernández tiene conexiones en las tres colectividades. Por un lado, es muy cercano al actual gobernador y exsecretario general del Partido Liberal Héctor Olimpo Espinosa, con quien hizo fórmula para las elecciones de 2019. Espinosa ganó. A Fernández, en cambio, no le alcanzó para ser alcalde de Sincelejo. Perdió el pulso con Andrés Eduardo Gómez, quien estaba apadrinado por el condenado William Martínez Díaz y el controversial político Yahir Acuña, quien el pasado 29 de junio se inscribió como candidato para la Alcaldía de la capital sucreña con el aval del Partido de La U. Aunque hasta hace unas semanas el nombre de Acuña estaba casi cantado para aspirar a la Gobernación por tercera vez –consolidándose como el rival más fuerte de Fernández– al final Acuña decidió ir por la Alcaldía de Sincelejo, un escenario menos competido. El aval llegó de la mano de su esposa, la congresista Milene Jarava, quien hace parte de la bancada de Dilian Francisca Toro.

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El trabajo mano a mano de Espinosa y Fernández ha tenido como núcleo la Secretaría de Planeación de Sucre, en donde el primo de la primera dama tiene su cuota burocrática. El secretario Jorge Herrera Bettin –conocido como Joty Herrera– es de la casa política de Fernández Alcocer e incluso fue alcalde encargado de Sincelejo en 2020 mientras la Procuraduría finalizaba un proceso de responsabilidad fiscal por 11.000 millones en contra de Andrés Gómez.

"Mario Fernández ha cogobernado el departamento con Héctor Olimpo en estos tres años, ambos son amigos y socios", le dijo a CAMBIO una fuente en el departamento.

Mario Fernández y Héctor Espinosa: ¿amistad erosionada o estrategia electoral?

Por ello causó sorpresa que el Partido Liberal le haya dado el aval a Lucy García Montes, exsecretaria de Inclusión Social de Sucre, como candidata a la Gobernación. García le ganó el pulso a otros curtidos diputados por ser de la entera confianza del gobernador Espinosa Oliver, quien comparte con ella haber nacido en el mismo municipio: Sincé.

Esta decisión –que deja a Fernández sin el apoyo del Partido Liberal– siembra la duda en la región acerca de si el gobernador y el primo de Verónica Alcocer rompieron relaciones por la decisión de Fernández de lanzarse a la gobernación y no a la Alcaldía de Sincelejo.

CAMBIO conoció dos versiones sobre el supuesto distanciamiento entre estos poderosos políticos:

Una versión señala que, en efecto, el gobernador y su socio Fernández Alcocer llevaron su alianza al punto máximo de tensión porque Fernández irrespetó el acuerdo pactado con Espinosa de ir por Sincelejo y dejar el camino libre a Lucy García hacia la gobernación.

Incluso, se rumora que los días de Joty Herrera como secretario de Planeación están contados, en retaliación por la movida de su padrino político. Además, el gobernador Espinosa Oliver ha sido un férreo crítico al Gobierno Petro, al igual que su hermana, Karina Espinosa Oliver, congresista liberal reconocida por sus posturas antiaborto y el proyecto de ley "cero cacho". Así, la cercanía de Mario Fernández con la Casa de Nariño habría erosionado su amistad con el mandatario local.

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"Agradecemos a Dios y al Partido Liberal por confiar en las mujeres liberales, queremos que Sucre tenga la primera mujer Gobernadora, nuestra apuesta es con la doctora Lucy García Montes. Su experiencia, capacidad de gestión y amor por Sucre, nos llenan de confianza para que nuestro departamento sea referente nacional", dijo Karina Espinosa.

Lo curioso de esta situación es que en febrero de este año –cuando la coalición de Gobierno seguía con vida– la candidatura de García Montes ya había recibido el apoyo de Fuerza de la Paz, el partido de Roy Barreras que hace parte del Pacto Histórico. En ese momento, la movida de Roy estuvo encaminada a conformar un frente amplio entre el petrismo y el Partido Liberal para ir por la gobernación casi que a la fija. Sin embargo, con los nuevos cálculos políticos de hoy y los liberales más lejos de la Casa de Nariño, el nombre de Lucy García no convence a todo el Pacto, que también tiene a Enoc Miranda y Remberto Benítez como precandidatos a la Gobernación.

Miranda le dijo a CAMBIO que el objetivo principal del petrismo es tener candidato propio en Sucre. "La instrucción y el deseo desde Bogotá es que tengamos un candidato propio que surja desde el consenso", expresó Miranda. Sin embargo, otro líder del Pacto Histórico en Sucre aseguró que "no se descarta que podamos ir en junta con la doctora García si vemos que las posibilidades y las encuestas no nos favorecen".

La otra interpretación que se maneja en Sucre sobre el aval liberal a García Montes y no a Mario Fernández Alcocer es que se trate de una estrategia para competir entre aliados y apostarle a ganar el primer y segundo puesto en las elecciones. Esto le garantizaría al grupo político de Héctor Olimpo Espinosa y Mario Fernández quedarse con la Gobernación y, además, con un asiento en la Asamblea para el que quede de segundo en las votaciones. "Es difícil de creer que ahora se presenten como rivales si toda la vida han sido socios", dijo Enoc Miranda, quien tiene el respaldo del Polo Democrático.

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Más allá de cuál escenario sea el correcto, lo cierto es que al primo de Verónica Alcocer le toca conseguir el aval de uno de los más de 35 partidos que hay en Colombia si quiere ser candidato.

CAMBIO conoció que en la baraja de Mario Fernández hay tres opciones: En Marcha, Mais y Cambio Radical. Este último podría ser el más fácil de conseguir, pues su esposa, Ana María Castañeda, es senadora de ese partido. Sin embargo, Fernández Alcocer no quiere parecer como la ficha de la derecha y perder el posible apoyo del petrismo. Lo ideal para Fernández es vender su imagen como el más capaz de gestionar recursos en la Casa de Nariño ante los partidos tradicionales, y como el ungido del presidente que tiene posibilidades reales de llegar al poder regional. 

La clave será Verónica Alcocer. Petro no está contento con el lobby que ha hecho Mario Fernández con altos funcionarios. En el consejo de ministros del 12 de junio le advirtió a su gabinete que el primo de su esposa no habla en su nombre, en respuesta a la información que le había llegado a Petro sobre las reuniones de Fernández con varios ministerios.

Con Fernández Alcocer cercano a Verónica pero no a Petro, el petrismo está lejos de tener claro qué hacer al respecto. Además, porque en el Pacto Histórico hay una molestia generalizada por la indiferencia con que los ha tratado la primera dama. "Ha sido decepcionante, ella se ha dedicado es a fortalecer su imagen y la de su primo, pero no la del Pacto Histórico", dijo un militante petrista de Sincelejo.

Por ello, la sensación generalizada en la coalición de movimientos que llevó a Petro a la presidencia es impulsar sus propios candidatos como prioridad y, si no, evaluar la adhesión a Lucy García Montes, dejando como última opción subirse a la campaña de Mario Fernández Alcocer. El problema es que no tienen claro si García hace parte de la estrategia del gobernador Espinosa y Fernández de apostar en varios frentes o si en realidad es la prueba del distanciamiento entre los dos aliados.