
Piedad Zuccardi.
Crédito: Colprensa.
Las reuniones con paramilitares que deberá explicar la baronesa de Bolívar, Piedad Zuccardi
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Zuccardi estaba en juicio en 2019 cuando decidió someterse a la Jurisdicción Especial para la Paz. Tuvieron que pasar cinco años para que esa justicia la rechazara, por no aportar verdad alguna. Y ahora el proceso tendrá que volver a arrancar. ¿Qué se le cuestiona?

La excongresista Piedad Zuccardi logró que durante cinco años el juicio en su contra por ‘parapolítica’ quedara en el limbo. Mientras el proceso estaba en marcha en la Corte Suprema de Justicia, y a pesar de que siempre alegó su inocencia, en 2019 la baronesa de Bolívar se acogió a la Jurisdicción Especial para la Paz.
Se esperaba que en su aporte a la verdad, un requisito indispensable para ser aceptada en esa justicia especial, Zuccardi explicara sus acercamientos con la cúpula de las Autodefensas o las reuniones que, según Salvatore Mancuso, tuvo con él y con Carlos Castaño. Lejos de hacerlo, la excongresista solo se dedicó a insistir, por cinco años, en su inocencia. Todo cuanto dijo ya lo sabía la justicia ordinaria. Además, usó a la JEP como una instancia más para exculparse.
Bajo esos argumentos, la semana pasada Zuccardi fue rechazada por la JEP. Ahora, más de diez años después de haber sido acusada, la Corte Suprema de Justicia deberá retomar el juicio en su contra por la presunta comisión del delito de concierto para delinquir agravado. El paso del tiempo habrá podido permitirle a Zuccardi alejarse de los titulares de prensa y del debate público, pero los hechos por los cuales deberá responder siguen siendo los mismos y tendrán que esclarecerse.
Las reuniones con paramilitares
La acusación contra Zuccardi, de octubre de 2013, consigna varias reuniones.
Por un lado, el exjefeparamilitar Edwar Cobos, alias Diego Vecino, declaró que Zuccardi estuvo junto con su esposo, Juan José García (hermano del condenado Álvaro García), en citas con el frente del Canal del Dique y su comandante, alias Juancho Dique.
El objetivo de estas reuniones sería impulsar la campaña de Alfonso López Cossio a la Gobernación de Bolívar en 2003. Una de esas citas, liderada por Iván Roberto Duque, alias Ernesto Báez, se hizo en Barranco de Loba, y otra en Casaloma, que es jurisdicción de Arjona.
Según la acusación de la Corte Suprema, Zuccardi estuvo en una reunión con el jefe paramilitar Carlos Castaño y con Salvatore Mancuso en enero de 2000. Mancuso declaró en noviembre de 2011 sobre este tema, en el juicio que la Corte adelantó en contra del congresista Javier Cáceres.
Mancuso dijo que Zuccardi estuvo “en múltiples reuniones con Castaño y que se comprometió con este, en una reunión que sostuvo en el año 2000, a impedir el Despeje del Sur de Bolívar”.
“(…) En las reuniones que tuvimos con ella y directamente ella con el comandante Castaño, unas institucionales y otras no institucionales, en alguna ocasión el senador Cáceres estuvo ahí o ella dijo que el senador Cáceres hacía parte de esa Comisión de Congresistas que nos visitaban. Eso sucedió cuando la época que el ELN estaba pidiendo el despeje del Sur de Bolívar”, agregó Mancuso.
Zuccardi insiste, y así lo dijo en la JEP, en que sostuvo solo una reunión y que la misma estaba autorizada, pero la acusación de la Corte Suprema no solo habla de varias, sino que las considera ilegales. A esos hechos, se suma que la baronesa, que lideraba el movimiento político llamado Nueva Fuerza Liberal, habría apoyado a las autodefensas junto con los hermanos Romero, Alfonso López Cossio y Miguel Ángel Rangel Sosa (condenados).
“Este grupo familiar patrocina la incursión de Mancuso en el Sur de Bolívar y le facilita a Ernesto Báez el trabajo político en el área de injerencia militar del llamado Bloque Central Bolívar”, dice la acusación.
En ese sentido, el alto tribunal tiene evidencias de que Castaño, Mancuso y Jorge 40 citaron a Rangel Sosa en el Nudo del Paramillo por ser parte de la familia de Zuccardi. Luego, hubo otra sesión en Caucasia con la baronesa y su esposo.
"Esas reuniones del año 2003, que conformaron el circuito político del Pacto de las Lobas, se ocuparon de oficializar la candidatura de López Cossio a la Gobernación de Bolívar y de proyectar los candidatos al Congreso de la República para el año 2006 […] de Miguel Ángel Rangel, Fernando Tafur, el hijo de la Gata Héctor Julio Alfonso López y Carlos Clavijo", agregó la Corte.
Lo que dice Zuccardi
Ante la JEP, la dirigente política insistió en que asistió a la reunión con Castaño y Mancuso en 2000 en calidad de senadora integrante de la Comisión Accidental de Paz, designada por el presidente del Congreso, Miguel Pinedo Vidal, como parte de una "gestión altruista" que hacía con ocasión de la iniciativa del Gobierno nacional de iniciar conversaciones con el ELN, que implicaba el despeje de ocho municipios del Sur de Bolívar.
También negó haber promovido al paramilitarismo y realizado pactos con grupos de autodefensa, mientras insistió que los testimonios en su contra serían manipulados. Ahora la Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema deberá retomar el juicio en donde se había quedado hace cinco años. ¿Cuánto tiempo más tardará en esclarecerse este caso?
