La novela detrás del desnombramiento de Mery Gutiérrez

“Lo que les voy a contar es un ejemplo de falta absoluta de dignidad”. Con esta frase, Daniel Coronell inició el relato de los pormenores de lo acontecido el lunes pasado en la Casa de Nariño.

Ese día, Mery Gutiérrez fue vista por varios periodistas en la sede de gobierno a pesar de que posesión había sido nuevamente aplazada: “la doctora Gutiérrez en lugar de entender el claro mensaje y facilitarle una salida al jefe de Estado, decidió aparecerse en la Casa de Nariño sin que nadie la llamara”, aseguró Coronell.

Según el periodista, Gutiérrez llegó a la misma hora de la posesión de la directora de la Unidad de Víctimas, Patricia Tobón, pidiendo ser posesionada: “varios colegas la vieron llegar como un alma en pena al palacio sin ningún decoro y también vieron cuando algunos funcionarios le solicitaron respetuosamente que se retirara del salón protocolario, para evitarse un mal rato y evitarle un mal rato al presidente”.

Con la incómoda situación se habría cerrado el novelesco capítulo del nombramiento de Mery Gutiérrez como ministra de las TIC. Al día siguiente se filtró desde presidencia la versión de que Gutiérrez había sido descartada definitivamente como ministra de las TIC.

Pero la novela no terminó allí, ese día en la noche fue difundido en redes sociales un comunicado con logos del Partido de la U, respaldando el nombramiento de Gutiérrez como ministra. Sin embargo, el comunicado no contaba con el aval de la presidenta de la colectividad Dilian Francisca Toro.

A esas alturas el senador Antonio Correa fue el único congresista de la U que siguió insistiendo en el nombramiento de Mery Gutiérrez como ministra.

Correa fue señalado en 2018 por Gustavo Petro como miembro del clan de Luz Enilce López, alias “La Gata”, condenada por nexos con grupos paramilitares.

El fallido nombramiento de Gutiérrez estuvo precedido por un intenso lobby y campañas en redes sociales. Durante estos quince días Mery Gutiérrez fue vista por los pasillos del Congreso con expresión apesadumbrada en búsqueda de apoyos.

Estos apoyos, por lo menos en redes, tuvieron alguna manifestación como la del presidente del Congreso Roy Barreras, quien el pasado 18 de agosto trinó dando “testimonio de la calidad humana de Mery Gutiérrez y su familia” y reconoció sus capacidades. “Ella conoce su sector y su experiencia la acompaña”

Sin embargo Barreras borró el trino.

El reconocimiento de Barreras a Mery Gutiérrez, tiene un antecedente relevante.
En julio del año pasado, Barreras inscribió su candidatura a la presidencia por el movimiento La Fuerza de la Paz, dicha colectividad funcionó en la sede de Programar Televisión, empresa propiedad de Mery Gutiérrez. Según el registro de gastos de campaña, el movimiento de Barreras le pagó a la empresa de Gutiérrez 32 millones de pesos por el arriendo de un piso del edificio ubicado en el céntrico sector del Park Way.

Aunque ya se da como un hecho que el nombramiento de Mery Gutiérrez fue totalmente descartado, en parte por el conflicto de interés derivado de una demanda de su empresa a la ANTV por 45.000 millones de pesos y los enredos que se han conocido con respecto a la presunta usurpación y demolición de un millonario predio en Chapinero, hay cuentas en redes sociales que siguen insistiendo en su llegada al ministerio, entre ellas la del Tercer Canal, establecimiento propiedad de la empresa de Gutiérrez, Programar Televisión, y que dirige su amigo cercano Hollman Morris.