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Purificador de agua creado en Colombia busca solucionar el problema de agua potable en las zonas rurales
Investigadores de la Universidad Javeriana desarrollaron un purificador que será destinado a las comunidades rurales de Colombia para impactar en las zonas del país que no poseen agua potable.
Este 25 de agosto comienza la Semana Mundial del Agua y Colombia es uno de los países con mayor volumen de agua en el mundo. En el territorio está presente de manera superficial y subterránea, hasta en glaciares y marinas-costales (aquellas situadas entre el mar y el continente, alimentadas por las desembocaduras de los ríos).
De hecho, según un informe del Instituto Humboldt publicado en 2021, el país se nutre de más de 48.000 humedales y ciénagas que acogen al 87 por ciento de la población.
Sin embargo, a pesar de tener uno de los líquidos más preciados en abundancia, no todo el mundo tiene acceso al agua en Colombia. Un artículo del Grupo Banco Mundial publicado en 2020 demostraba que, en aquel momento, 391 municipios de Colombia estaban expuestos a riesgo de sufrir escasez de agua. Además, el más reciente índice de pobreza multidimensional realizado por el Dane muestra que para 2023 el 9 por ciento de la población no tenía acceso a agua potable.
Frente a esta situación, dos ingenieros de la Pontificia Universidad Javeriana inventaron un purificador de agua con una lámpara de luz ultravioleta no convencional, de encendido instantáneo, que busca suplir la necesidad de agua potable en todas esas regiones del país.
La creación del dispositivo, llamado PureStream, según David Magín Flórez, profesor de la Pontificia Universidad Javeriana del Departamento de Ingeniería Electrónica y uno de los investigadores del proyecto, “surgió del interés de ver la realidad de nuestro país, donde la zona rural suele tener problemas de agua, con un riesgo alto de salubridad por la falta de agua potable”.
¿Cómo funciona el purificador?
El purificador tiene una bomba de agua que inyecta el líquido, que puede provenir de un pozo profundo, de un acueducto veredal o un tanque de agua lluvia. Después pasa a la lámpara de luz ultravioleta de alta intensidad que va matando los microorganismos patógenos que pueden producir las enfermedades. Finalmente, el agua queda almacenada en el recipiente para el consumo.
El funcionamiento de PureStream tiene múltiples ventajas de purificación y desinfección comprobada, que permite eliminar bacterias, virus y parásitos con resultados superiores al 99 por ciento. Así lo mostraron las pruebas de campo realizadas en zonas rurales de la Mesa y Guasca, donde los investigadores habían identificado dichos microorganismos en el agua.
Un producto creado para las comunidades rurales
El producto es portátil, versátil y adaptable a diferentes volúmenes de potabilización y desinfección de agua, buscando preservar propiedades como olor, sabor y minerales. Lo anterior, con el objetivo de suplir las necesidades y limitaciones que viven las comunidades rurales al momento de acceder a fuentes hídricas, especialmente para el consumo humano.
A nivel ambiental, se mitiga el consumo de plástico porque ayuda a que la población que carece de agua potable no tenga que comprar bolsas de agua o botellones.
Además, la purificación de agua es más barata que la compra del líquido y evita realizar traslados largos en zonas como La Guajira, donde los niños y mujeres deben caminar por horas con baldes de agua para poder consumirla en sus hogares.
“El dispositivo permite que si alguien recolecta agua lluvia o consume agua de las quebradas, no solo se pueda recolectar el agua, sino que se pueda purificar y consumir de forma más sencilla”, mencionó Magín.
Los obstáculos en la producción y comercialización del dispositivo
Aunque el modelo más avanzado ya cuenta con una patente―la cual permite buscar protección para una invención en muchos países al mismo tiempo―, todavía existen algunos obstáculos en la financiación que impiden escalar el proyecto y llegar a las zonas alejadas del país.
El dispositivo solo se instauró para las pruebas de microbiología, pero no quedó instalado permanentemente en las comunidades por la falta de recursos. “Estamos buscando financiación para poder producir una serie de purificadores y llevarlos a municipios y comunidades que requieran del tratamiento de agua”, expuso el investigador de la Javeriana.
Según Magín, la etapa que sigue es producirlo en serie a nivel industrial y buscar financiación para hacer la producción de las lámparas en el país, ya que ellos diseñaron todas las piezas mecánicas y la electrónica, pero la lámpara como tal se produce fuera de Colombia.
“Se necesita inversión inicial de aproximadamente 200 millones de pesos, con el fin de hacer los primeros sistemas de producción y para producir el primer lote de 100 purificadores se necesitan aproximadamente 400 millones de pesos”, concluyó Magín.
Frente a esto, el investigador hizo una invitación a todos los inversionistas y empresarios para que conozcan más sobre la iniciativa y sus posibles proyecciones. Además, habló de la importancia de proteger el recurso y de prestarles atención a las fuentes hídricas y las zonas del país que carecen del preciado líquido.