La ‘Mad Max criolla’: así era la tanqueta artesanal blindada en la que se movilizaban dos disidentes de las Farc

En las últimas horas, tropas de la Fuerza de Tarea Vulcano del Ejército Nacional lograron la captura de dos integrantes del Frente 33 de las disidencias de las Farc en el sector de Barrio Largo, en el municipio de Tibú (Norte de Santander). En el operativo se incautó una tanqueta blindada equipada de forma artesanal por miembros de la estructura al margen de la ley.

De acuerdo con el Ejército, los disidentes capturados en flagrancia serían los responsables de las recientes confrontaciones entre el Frente 33 y las estructuras del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que tienen presencia en la región. Además, son señalados de amedrentar a la población civil con sus ofensivas militares en diferentes municipios del departamento. 

“Entre el material incautado se encuentra una tanqueta artesanal, una camioneta de alta gama, dos motocicletas, municiones, proveedores, material de intendencia y comunicaciones, elementos acondicionados que se usarían en acciones terroristas", explicó el Ejército tras el reciente operativo en contra del grupo armado residual. 

Las autoridades informaron que la captura de los disidentes representa un nuevo avance en la implementación del Operativo Catatumbo, en el que se ha logrado la captura de 24 miembros del Frente 33 y 34 integrantes del ELN en los últimos meses. Además, la institución reiteró que la incautación resulta clave para debilitar a las estructuras ilegales que operan en zona fronteriza. 

‘Mad Max criolla’: la tanqueta blindada diseñada artesanalmente por las disidencias de las Farc

En el operativo llevado a cabo en zona rural de Tibú, la Fuerza de Tarea Vulcano identificó una camioneta Toyota Land Cruiser equipada de forma artesanal por el grupo armado residual. Con múltiples latas metálicas, los disidentes recubrieron la carrocería para reforzar la defensa del vehículo utilizado a manera de tanqueta en las confrontaciones armadas. 

En la parte frontal del vehículo, los disidentes soldaron una lámina gruesa para resistir los impactos de bala y proteger el radiador. Además, los guerrilleros equiparon la tanqueta criolla con una placa blanca para garantizar su circulación continua por las vías del país y evitar que el pico y placa detuviera las acciones bélicas programadas por la estructura. 

En el platón de la camioneta, los ingenieros artesanales del Frente 33 utilizaron tubos, plástico y metal para diseñar una especie de torre que le permitía a sus artilleros visibilizar los objetivos en terreno. Además, cubrieron el parabrisas con una lámina que le ofrecía protección y seguridad al conductor del vehículo militar improvisado. 

El Ejército Nacional informó que la tanqueta artesanal, diseñada para recorrer las vías rurales de la región del Catatumbo, y los miembros de las disidencias que se movilizaban en ella fueron dejados a disposición de las autoridades competentes para avanzar en el proceso de judicialización.