Los secretos del narcochofer de la UNP

Manuel Antonio Castañeda fue capturado el 10 de diciembre del 2022, con 168 kilogramos de cocaína, en un vehículo de la UNP que pertenecía al esquema de seguridad del exsubdirector de Protección de la UNP, Ronald Rodríguez, quien fue detenido seis meses después por los hechos.

En ese momento, Castañeda, denominado el ‘narcochofer’, hizo estallar uno de los mayores escándalos de corrupción en esa entidad: el alquiler de vehículos del estado para transportar droga y bandidos.

Castañeda contó a la justicia que se había prestado para transportar a alias Matamba, luego de que este se fugó de la cárcel la Picota, de Bogotá, en marzo del 2022, y ofreció ser testigo contra funcionarios corruptos.

Sin embargo, seis meses después, la Fiscalía no le ha definido si le da beneficios a cambio de su información, que parece no interesarles a los investigadores a pesar de que, gracias a su testimonio, ya fueron imputados Ronald Rodríguez y el sindicalista de la UNP Wilson Devia; y enviados a la cárcel el capitán del Gaula de la Policía Luis Duque Casas y Édgar Munevar, alias el Caballista, quienes, según la Fiscalía, participaron en la fuga del narco del Clan del Golfo.

Como ya duda de que a la justicia le interese la información que tiene, Castañeda decidió destaparse. Dice, por ejemplo, que dentro de la información que ha entregado a la justicia están mencionados los generales Eduardo Enrique Zapateiro, excomandante del Ejército; Fernando Murillo, exdirector de la DIJIN; y Ricardo Londoño, también exdirector de la DIJIN, los dos últimos mencionados directamente –asegura– por alias el caballista.

El general Fernando Murillo, exdirector de la Dijin, le dijo a CAMBIO que no conoce a Édgar Munévar, y que nunca ha contestado con el crimen o con los delincuentes. Sobre Castañeda, dijo: “Sí tuvo contacto con la Dijin, fue la primera unidad que buscó, lo escuchamos dos horas y lo entregamos a las unidades que estaban haciendo la investigación, que era la dirección antinarcóticos e inteligencia de la Policía".

CAMBIO trató de contactar a los generales Zapateiro y Londoño, pero no contestaron en sus números de celular.

Fuentes de inteligencia de la Policía advirtieron que Castañeda sí mencionó lo del general Zapateiro, pero que rápidamente establecieron que no era cierta la información, por fuentes de esa estructura. Sobre lo de los generales Murillo y Londoño, aseguraron que no conocieron esa información de la que habla el ‘narcochofer’. Además, dijeron que dejaron de trabajar con Castañeda porque se dieron cuenta de que su única relación con la estructura era Édgar Munévar, alias El Caballista, y que no los llevaría a la ubicación de alias Matamba.

"Esto es como un pulpo: muchos brazos y todo el mundo tiene sus tentáculos ahí"

VIDEO ENTREVISTA

CAMBIO: Usted hizo parte de la Policía Nacional. ¿Quién es Manuel Antonio Castañeda y en qué momento se empieza a mover en el mundo del hampa?

Manuel Antonio Castañeda: Yo ingresé a la policía en el 2005, fui egresado de la escuela Eduardo Cuevas, de Villavicencio; duré aproximadamente 11 años en la institución; trabajé en la Dipro, que es la Dirección de Protección, escoltando personalidades. Me retiro por voluntad propia por temas económicos, porque pues para nadie es un secreto que los sueldos de los funcionarios públicos son bastante bajos. Me retiro y pues -realmente- empiezo el tema de mi actividad comercial; son actividades como contratar un artista en una discoteca, eventos mínimos realmente es como se empieza, y desde ahí es que empiezo, pues, mi vida comercial.

CAMBIO: Después de su captura en diciembre, la gente se da cuenta de que a usted lo capturan con cocaína en un vehículo de la UNP y que ese vehículo de la UNP pertenecía a Ronald Rodríguez. ¿En qué momento empezó a trabajar en esas actividades ilegales con los vehículos de la UNP?

M.C.: Pues realmente yo a Ronald ya lo conocía antes del episodio de trabajar con narcotráfico, pero pues nunca habíamos como afianzado el una relación como tal, pero pues da la coincidencia que, en una reunión que existió en abril del año pasado con unas personas que son los dueños de la mercancía, de la cocaína, coincidió que pues teníamos una relación en común y que conocíamos a Ronald y ahí, básicamente es donde empieza el tema de del transporte, o de la logística, que él me iba a suministrar o nos iba a suministrar para el transporte cocaína.

En esa reunión, lo que se hace es entablar algunos temas como son los precios por kilo, donde posiblemente son los movimientos a nivel nacional, cómo vamos a usar todos los contactos de Ronald y los míos y como los de los dueños de la mercancía. Básicamente, ahí empieza todo el tema con Ronald. La función de Ronald era suministrar los vehículos de la entidad. Como Ronald en ese momento estaba como subdirector de la UNP, tenía esa facilidad de darme los vehículos. Ronald me daba los vehículos y él tenía conocimiento de para qué eran. No como ha dicho: que yo lo engañé o abusé de su buena fe. No, eso es falso. Que él no participaba en los desplazamientos, que iba yo, sí, es así, pero obviamente era con conocimiento y con coordinación con el mismo Ronald.

CAMBIO: ¿A quiénes estaban asignados los vehículos que le prestaba?

M.C.: En muchos de los viajes que se hicieron, porque fueron varios, fueron más de 8 o 10 tipos de vehículos que él sacaba de automotores de la unidad. Ese tema de ese manejo interno, pues, lo hacía era él, él sacaba los vehículos y posteriormente yo era el que lo recibía y de ahí en adelante era yo el que hacía el resto de las coordinaciones.

CAMBIO: Esas negociaciones con Ronald Rodríguez –le entiendo–iniciaron a partir de abril del 2022. Usted antes representaba artistas. ¿Es a partir del 2022 que usted empieza a mover droga y bandidos en vehículos oficiales?

M.C: Hay que tener presente que en el 2019 yo ya conocía a Wilson Devia. Ahí fue donde empezó, digamos, mi relación con la UNP, no después de Ronald, sino antes, que fue en el 2019, cuando Wilson Devia empieza a alquilarme los esquemas de protección.

CAMBIO: Antes de que a usted lo capturaran en diciembre, cuatro meses antes, en agosto, cayó un vehículo de la UNP con droga en Pereira y ahí capturaron a un primo suyo. ¿Ese vehículo lo había sacado de la UNP gracias a la alianza que tenía con Wilson Devia?

M.C.: Ese vehículo incluso pertenecía al esquema de Yesid Torres (Yesid Alexander Torres Rojas, alias Mata Caballos, desmovilizado de la extinta guerrilla de las Farc), que es el esquema que me habían alquilado.

CAMBIO: ¿Cómo empiezan sus contactos con Wilson Devia?

M.C.: Desde el año 2019. Realmente yo lo conozco a él por una tercera persona, que se llama Juan Pablo Ortiz, que es una escolta la UNP, y es por él que yo estoy buscando la manera de poder acceder a un esquema de protección de la UNP, por un tema de amenazas en los años 2018-2016, y esta persona me dice que Wilson Devia es el presidente del sindicato y él me puede ayudar a buscar lo que quiero.

Entablamos una reunión con Wilson y Juan Pablo, y Wilson me dice que él me puede ofrecer un esquema, pero pues que me tiene que cobrar 200 millones de pesos, porque tiene que cuadrar el tema de los estudios de seguridad con personal interno de la UNP para que todo quede legalmente constituido. Como es bastante elevado el costo, pues yo le dije que no; y a los pocos días pues él me contacta por intermedio de esta persona, Juan Pablo, para hacer otro tipo de negociación, donde me plantea que me puede alquilar un esquema de protección, asignado a un protegido, pero que el protegido presta tanto los escoltas como el protegido para estar a disposición mía, o sea, literalmente, yo tomaba decisiones sobre el esquema, yo decidía qué escolta se cambiaba, todo y sobre el mismo protegido, que era Yesid Torres. Realmente yo era el dueño del esquema, no el mismo protegido.

CAMBIO:¿A partir de qué momento usted empezó a mover qué en los carros que le sacaba Wilson Devia?

M.C.: No, cuando yo empiezo, digamos, con el tema de la negociación que se hizo con Wilson, fue básicamente para uso personal el esquema, aún yo no estaba con temas de narcotráfico ni nada de esto; finalmente se usaba era por temas de seguridad, porque se estaba requiriendo y eso fue, básicamente, lo que se hacía, o sea solo.

CAMBIO: y fue entonces desde 2022 que usted empieza a transportar droga…

M.C.: Fue con el tema de la marihuana, en la cual fue capturado mi primo e incautado ese vehículo de la UNP, que era el de Yesid Torres, el cual me habían alquilado a mí desde el 2019 y 2020. Ya, posteriormente, pues es cuando yo empiezo a la par una relación con Ronald Rodríguez, que era subdirector de la UNP. Ya yo con Ronald manejaba era otro tipo de transporte, que era la cocaína.

CAMBIO: ¿Cuántos cargamentos alcanzó a mover en vehículos oficiales?

M.C.: Más de 8 viajes.

CAMBIO: ¿Todos coordinados o con la ayuda de Wilson Devia y Ronald Rodríguez?

M.C.: Exactamente.

CAMBIO: En esa colaboración con la Fiscalía, ¿hay otros nombres de superiores de Wilson Devia o de Ronald Rodríguez que estén involucrados en actos de corrupción?

M.C.: La información que se ha suministrado ha sido valiosa, al igual que la que se dio con el tema de Ronald, porque efectivamente pues a Ronald lo capturaron y desafortunadamente, pues por el tema de que me genera más riesgo para mí y para mi familia, porque a medida de que van cayendo personas, pues obviamente eso me aumenta el riesgo a mí a mi familia, porque es gente de alto poder que no se va a quedar quieta y adicionalmente, pues ahí lo que usted mismo acaba de decir: hay gente más poderosa detrás de ellos.

CAMBIO: ¿Hay directores de la UNP metidos en este entramado de corrupción?

M.C.: Por parte de Wilson Devia y de Ronald Rodríguez, sí, pero pues si hablamos del actual director, no, porque pues lo contrario, el actual director es a quien yo le pongo un conocimiento de esas actividades. Días anteriores a mi captura, por intermedio una persona de confianza, hubo un acercamiento para poner un conocimiento todo esto; incluso, le puse en conocimiento parte del tema de la fuga de Matamba, que yo había sido conductor de ese vehículo.

CAMBIO: Usted está recluido en un batallón militar. ¿Tiene miedo de lo que le pueda pasar?

M.C.: Sé que los tentáculos de Wilson, de Ronald, de miembros de la institución de la Policía Nacional, del Clan del Golfo, de la fuga Matamba, pues toda esta gente tiene un interés en común, que es que yo no siga hablando, entonces son personas que no se van a quedar quietas. Finalmente, me han hecho ofrecimientos de dinero y, como no he querido aceptar ofrecimientos de dinero, pues me han hecho amenazas.

CAMBIO: ¿Quién le ha ofrecido dinero?

M.C.: Me ha hecho Wilson Devia, me han hecho por parte de Ronald Rodríguez, me han hecho por parte del Clan del Golfo, que es del tema de Matamba. Acá realmente me siento seguro porque no he tenido ningún tipo de amenaza; no como me pasaba con el INPEC.

CAMBIO: ¿Cuánto le han ofrecido para que no hable?

M.C.: Lo máximo,1.200 millones de pesos.

CAMBIO: Si a usted le ofrecen 1.200 millones de pesos no es solo para que no hable más de un exsubdirector y un sindicalista de la UNP. ¿Hay más? ¿Qué es lo que no quieren que cuente?

M.C.: Ellos saben que tengo información eficaz para la Fiscalía, como nombres claves de personas que son de estructuras criminales, que tienen mucho poder y gente que son ocultas ante la sociedad, pero que tiene mucho poder, que los ven con un tipo de imagen diferente, detrás de esas personas hay políticos. Esto es como un pulpo: muchos brazos y todo el mundo tiene sus tentáculos ahí.

No quieren que siga hablando del tema de Matamba, porque, si sigo hablando, salpica a más personas, a pesar de que ya hay unos resultados por parte de la Fiscalía.

Del tema de Ronald y la UNP. Si sigo hablando, va a salpicar a funcionarios, exfuncionarios, miembros de la Policía Nacional, al igual que en el caso de Wilson Devia, porque, entre todas las cosas que se hacían, todos tienen personas las cuales aportaban o ayudaban para que el tema ilegal se hiciera. La cabeza más grande no quiere que salgan nombres a la luz porque son de organizaciones criminales que están en la sombra y obviamente, pues yo las voy a sacar a relucir, entonces hay gente que no quiere que eso pase y sé que van a hacer lo posible por que eso no ocurra.

CAMBIO: ¿Usted cree que hay altos oficiales de la Policía y exdirectores de la UNP metidos en ese entramado de corrupción que se involucra con el narcotráfico?

M.C.: Efectivamente, yo fui el puente directo para que todo esto se hiciera y, aparte de Ronald, se hacían coordinaciones con personas de la Policía Nacional, para yo poder hacer toda esa cantidad de viajes que se hizo a nivel nacional, Bogotá-Cartagena o Huila-Cartagena, que son más de 20 horas, yo no podía pasar todo eso así de chévere, siempre había una persona con la que se coordinaba. Nombres específicos no te podría decir, pero sí miembros de la Policía Nacional, altos oficiales, suboficiales, nivel ejecutivo.

CAMBIO: ¿Usted tenía contacto con generales o coroneles que le ayudaban a pasar droga de un lugar a otro?

M.C.: De cierta manera, sí, entre coroneles y generales se hacían unas coordinaciones esos. Estamos en el tema de negociaciones con la Fiscalía, sea el principio o el preacuerdo, lo que más uno quiere es el tema del principio, pero todo se está dando en una matriz de colaboración.

CAMBIO: ¿Usted ve voluntad de la Fiscalía para un principio de oportunidad que es inmunidad penal?

M.C.: Quisiera creer que la Fiscalía tiene la mejor voluntad. Espero que sea así, que no me ocurra como en el caso de Matamba, que la Fiscalía me prometió una cosa, la otra. Yo aspiro a que la Fiscalía tenga la mejor voluntad y que yo no me haya expuesto y a mí como a mi familia, a son de nada.

CAMBIO: Es su palabra contra la de los señalados. ¿Usted tiene pruebas de todo lo que ha dicho a la justicia?

M.C.: La gente pone en duda la verdad, entonces difícil que le crean a uno, pero pues están las pruebas, están los soportes. Estamos hablando de consignaciones, videos, audios, fotografías de todo tipo de cosas que se hacían, ubicaciones (gps).

CAMBIO: Usted dice que tuvo contacto con oficiales de alto rango de la Policía que le ayudaban a mover la droga en vehículos de la UNP, de un lugar a otro. ¿Le ayudaban en otras cosas a esas organizaciones?

M.C.: Haciendo referencia a la fuga de Matamba, cuando se fugó –y pues yo fui el conductor–, lo dejamos en una que finca que era la de un amigo, no sé si era la de alias Pájaro. Esa noche a la madrugada, Pájaro le dice a uno de sus empleados, o al encargado de la finca, porque había como 10 o 15 tipos ahí, le dijo 'sáqueme el regalo que me envió el general Zapateiro'. Cuando sacan, son bolsas de fusiles, granadas, y las pusieron ahí encima de la mesa y empiezan a distribuirlas.

CAMBIO: Vamos a pasar a ese episodio de Matamba. En diciembre del 2022 nos dimos cuenta, públicamente, de que usted fue uno de los conductores de Matamba. ¿Cómo lo contactaron a usted? ¿Cómo llegó usted a recoger a Matamba?

M.C.: El día anterior de la fuga de Matamba, como a las 4 o 5 de la tarde, me contacta Édgar, alias El Caballista. Inicialmente, era el alquiler de un vehículo por un fin de semana para recoger una personalidad, pero no especificaron quién. Me dijeron que me pagan cuatro millones de pesos por el fin de semana, yo no tenía problema. Él llega a mi casa en Bogotá, con una persona que no sabía quién era, pero pues la persona llegó vendada, recién operada la cara. Era pájaro. Finalmente, pues él me dijo 'coja toda la Boyacá hacia Villavicencio'; pero, pues, nunca me dijo hacia qué punto, simplemente hacía caso porque estaba contratado por el servicio y ellos pues no hablaban de nada sospechoso.

Finalmente, ahí en el botadero Doña Juana hay un retorno, hago el retorno y a la par viene un Clío, yo observo que iba una persona con uniforme del Inpec, me dicen que me orille, esa persona se hace detrás de la camioneta que yo iba conduciendo y ahí se baja alias Matamba, que en su momento no sabía quién era, pero él se baja con sudadera y no con uniforme del Inpec.

El tipo se baja con una bolsa negra, le da un pico a Pájaro y a Edgar en la frente y fue cuando me di cuenta deque traía la bolsa negra de dinero y la pistola con silenciador. Efectivamente, sabía que no iba a cargar una perita en dulce, pero no iba a hacer un reclamo.

Yo los iba siguiendo hasta que en una ruta salen carros oficiales. En uno de esos trayectos, Matamba se pasa a uno de los carros de la Policía y, obviamente, pues yo empiezo a guardar en mi cabeza las placas de los vehículos, pero pues sin hacer ningún tipo de reclamo. En ese momento es cuando Edgar me cuenta a quién estamos moviendo. Yo no me podía negar del desplazamiento, me tocaba continuar.

En ese trayecto sí participaron policías. Eran vehículos de la institución y pues más adelante es cuando me entero de que participaron oficiales del Gaula, patrulleros y, pues, un señor teniente coronel que es de apellido Téllez (Carlos Téllez), que en su momento era comandante del Gaula Bogotá. Tengo entendido que sigue activo no entiendo por qué. La Fiscalía no ha avanzado en ese tema de la investigación, si se le aportó a la Fiscalía un audio aproximadamente de dos horas, que ellos mismos en actividades me pusieron a grabar a esta gente, y mencionan ciertos oficiales. Incluso, a un señor general, que es el general Murillo, que, finalmente, pues no ha avanzado.

CAMBIO: ¿En qué contexto mencionan al general Murillo?

M.C.: El general Murillo sale mencionado en una grabación que se hace en una bomba que queda en la Rojas con 26. Por coordinación de la Policía, me pasan una grabadora para tener un soporte de esa reunión con alias El Caballista y el capitán Duque, que pertenecía al Gaula y colaboró en la fuga de Matamba.

Esa reunión se hizo con el fin de tener pruebas y darse cuenta de que efectivamente Édgar y el capitán estaban participando en temas ilícitos. En esas conversaciones, en la bomba, se hablaron de algunos coroneles que les ayudaban a ellos, en especial a Edgar, cuando estaban de comandantes de otros departamentos.

Edgar hace mención al general Murillo cuando era coronel y comandante del Tolima, menciona que el general Murillo tiene intestinos artificiales por un atentado, que el general Murillo les colaboraba muchísimo en temas de coordinaciones internas para ellos poder delinquir, y que el general les ayudaba.

Hace mención a un general Londoño Portela, anterior director de la Dijin, y Edgar manifiesta que era cuota de ellos y también de hace referencia al Coronel Téllez, que el capitán Duque hace el comentario que el coronel no lo puede sostener más porque el capitán iba trasladado para Chocó y él estaba mirando la manera que no lo trasladaran.

CAMBIO: ¿En qué momento usted se acerca a la Fiscalía a decir que fue uno de los conductores de Matamba?

M.C.: El día mismo de la fuga de Matamba sale el ‘boom’. Mi intención era decirle a la Policía, pero pues venía de una conversación donde Édgar hablaba por teléfono: 'bórreme los vídeos, coronel, mayor, bórreme tal cosa', pues yo dije: 'fui miembro de la Policía, este man está llamando policías, voy a poner la denuncia y me pelan'.

Entonces, finalmente, emitimos un correo a la embajada americana informando de que yo tenía conocimiento de ciertas cosas. La primera persona que supo del tema fue de la embajada, y posteriormente la Policía Nacional, por intermedio el general Murillo, quien era director de la Dijin, que era el enlace entre la DEA y la Policía.

Empiezan a hacernos polígrafos para corroborar que la información es verdad, hacer recorridos. Yo muestro mi voluntad por mostrar dónde estuvimos y por ratificar que lo que decía era verdad. Todo eso lo hice: actividades de campo que me pusieron a hacer, a ganarme la confianza de Édgar, gente del Clan del Golfo, Pájaro, todo este tema, todo en coordinación con la misma Fiscalía.

Me prometieron el cielo y la tierra, que si capturaban a Matamba me iban a sacar del país, que porque la Embajada Americana tenía una relación con ellos y, finalmente, la Fiscalía no me cumplió, me dejó solo; y lo contrario: la información se fuga de la misma Fiscalía. Esa información que yo había dado, que yo era como la fuente, se fuga.

Gracias a Dios, afortunadamente, no la obtuvieron de primera mano las personas del Clan del Golfo, sino que la obtuvieron las personas que hoy día son los dueños de la mercancía, por la cual me capturan y, a cambio de protección, de que no me matara el Clan del Golfo, personas que me dicen 'listo, nosotros lo protegemos, pero trabaje con nosotros. Es cuando me meto en el tema de la droga.

CAMBIO: En esas actividades que hace para las autoridades en medio de la investigación para dar con Matamba, ¿vuelve a escuchar el nombre del general Zapateiro?

M.C.: Pues el nombre como tal no volvió a salir a relucir porque obviamente mis encuentros siempre serán con Edgar, ya no era Pájaro. Edgar siempre fue la persona principal con la que yo me reunía. El único encuentro que hubo como tal fue una reunión que se hizo en Puerto Boyacá, que fue donde fueron todos los campos del Clan del Golfo y otras organizaciones, que fue buscar un presupuesto para liberar a Otoniel. También asistió Matamba.

CAMBIO: ¿Qué le entregó a la Fiscalía sobre esa investigación?

M.C.: Se entregaron placas de vehículos que participaron en la reunión y alias, porque yo no estaba mezclado en la reunión, estaba poco alejado, pero tomé placas de todo.

CAMBIO: En ese audio que grabó en la estación de gasolina, ¿qué otros oficiales fueron mencionados?

M.C.: El capitán Duque, que ya está capturado; el del teniente coronel Téllez, que están en etapa de investigación, supongo, que pues no he visto resultados de eso, y hay otras pruebas que se le otorgaron a la Fiscalía donde se nombran generales, coroneles, pero pues estamos esperando a ver qué ocurre. Todos involucrados en la fuga de Matamba, no en el transporte de la droga.