¿Quiénes son los exparamilitares que involucraron a Lucho Herrera con la desaparición forzada de cuatro personas?

La decisión del Juzgado Cuarto Penal de Fusagasugá de compulsar copias a la Fiscalía para que investigue a la leyenda del ciclismo colombiano Lucho Herrera por su presunta participación en la desaparición de cuatro personas tiene al país sorprendido.

El juzgado condenó anticipadamente al exparamilitar Luis Fernando Gómez Flórez, alias Ojitos o Ferney a 22 años de prisión por la desaparición forzada de Gonzalo Guerrero Jiménez, Víctor Manuel Rodríguez, José del Carmen Rodríguez y Diuviseldo Torres Vega, de quienes no se volvió a saber desde el 23 de octubre de 2002, cuando hombres armados los sacaron de sus casas ubicadas en zona rural de Fusagasugá.

Lo relevante es que alias Ferney, así como Héctor Díaz Gaitán, alias Camargo, y Óscar Andrés Huertas Sarmiento, alias Menudencias, aceptaron su responsabilidad en el crimen e indicaron que el mismo habría sido una suerte de favor que el ciclista le habría pedido a Martín Llanos, jefe de las Autodefensas Campesinas del Casanare (ACC). Según la versión de alias Ferney u Ojitos, Herrera les habría dicho que las víctimas eran milicianos de la guerrilla que pretendían secuestrarlo y que vivían en una finca que colindaba con la del exciclista.

¿Quiénes son estos exparamilitares?

La información disponible sobre Luis Fernando Gómez Flórez, preso en la cárcel de El Barne, en Boyacá, es escasa. Se sabe que nació el 6 de octubre de 1973 en Aguazul, Casanare, y cursó hasta quinto de primaria. Fue parte de las ACC, que lideró primero Héctor Buitrago y luego su hijo, Héctor Germán Buitrago, conocido con el alias de Martín Llanos.

Esa estructura paramilitar se consolidó en los años noventa y 2000 y siguió la senda de la organización Los Buitragueños, manteniéndose separada de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), de los hermanos Castaño. Esa decisión generó un sangriento conflicto con Miguel Arroyave, quien lideró el Bloque Centauros de las AUC, por el control de los Llanos Orientales, así como con otros bloques que buscaban asentarse en Arauca, entre otros.

Luis Fernando Gómez Flórez era encargado de las finanzas del grupo urbano de las ACC en Fusagasugá. Fue soldado profesional y hacia 1997 ya era integrante del grupo paramilitar. Fue patrullero hasta 1999 y luego pasó a ser escolta de alias Tailor y Palillo, comandantes de finanzas para todo el Casanare. En 2000 fue escolta de alias Toledo, encargado de cobrar a todas las multinacionales. Fue asesinado por los mismos paramilitares y ese mismo año pasó a ser citador de finanzas.

Gómez Flórez les pedía plata a los dirigentes políticos del Casanare y a los encargados de las fincas y las arroceras. Estuvo involucrado en los robos de los helicópteros de la petrolera Perenco y fue escolta varios años más. “De ahí me recoge alias 28, de nombre Jairo Melgarejo, preso en la cárcel de Yopal, él era el comandante general de finanzas, de ahí es que nos ordenan citar a políticos de la región del Casanare para que cumplieran con el tema de la contratación con la organización. De ahí 28 me manda de escolta de un señor alias 200 o don Alberto, para Garagoa (…) dure un término poco porque el patrón Martin Llanos me manda a trabajar en los mataderos en Bogotá”, dijo. Estaba de segundo al mando de alias Cascarón y luego fueron enviados a Fusagasugá.

Según su declaración, le ordenaron negociar con el ciclista. “Lucho Herrera dijo que él cuadraba directamente con don Martín y don Héctor. Entonces se cuadró una reunión, se ordenó bajarlo a los dos días (al Meta)”, dijo. La cita se hizo, según su versión, en una finca llamada Hitoco y, después de la misma, Martín Llanos ordenó que le “colaboraran” a Herrera en lo que quisiera.

“El día que llegamos a Fusa, viniendo del Meta, nos dice que tiene que mandar a limpiar a una gente, que era miliciana de la guerrilla, pero que cualquier cosa nos entendiéramos con un señor de nombre Rafael. Como a los ocho días el señor Rafael (…) y me atiende el señor Lucho Herrera (…) me dice que tiene algo para darme, sale y me da dos sobres de manila, en uno de ellos venia las fotos de cuatro personas, que teníamos que recoger, dijo que eran milicianos de la guerrilla que lo iban a secuestrar y en el otro sobre había 40.000.000 de pesos y nos dice que si quiere para comprar unas pistolas y unas motocicletas”.

El crimen lo hicieron los grupos urbanos o especiales de las ACC y esa estructura especial estaba al mando de Héctor Díaz Gaitán, alias Camargo. Según el testimonio de Gómez, Díaz era quien tenía relación directa con Martín Llanos.

De Díaz tampoco hay mucha información pública. En registros judiciales aparece que, en agosto de 2012, el Juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Yopal condenó a Héctor Díaz Gaitán y a tres exparamilitares más por la desaparición forzada, homicidio y tortura agravada de Diomedes Camargo Franco. La víctima era un docente en Aguazul, Casanare, y había denunciado las amenazas que recibía de desconocidos que le decían que debía irse de la región. El 22 de julio de 2002, dos hombres lo sacaron a la fuerza de su casa y desde ahí no se supo más de su paradero.

Héctor Díaz dijo a la justicia que a Lucho Herrera y a Rafael les estaban robando ganado y que eran víctimas de amenazas por parte de las Farc. Según su relato, Rafael fue quien señaló a unas personas que estaban en una gallera. Se identificó como integrante del DAS, se llevó a tres hombres y luego los mataron y enterraron en una finca ubicada en la vereda Tibacuy, delante del Club El Bosque. Díaz dijo que alias Cascarón habló con Lucho Herrera y que este supuestamente fue llevado a hablar con Llanos.

El tercer exparamilitar que menciona a Herrera es Óscar Andrés Huertas Sarmiento, alias Menudencias. De él se sabe que nació el 15 de abril de 1983 en Aguazul, Casanare, y que hacía parte de las ACC que actuaron en Cundinamarca a comienzos de 2000. Una condena en su contra señala que las ACC, en alianza con integrantes del Batallón 28 de Infantería del Ejército, cometieron lo que hoy se conoce ampliamente como falsos positivos. La condena se dio por el crimen de Alonso Rincón León y José Alfredo Castañeda el 26 de marzo de 2003 en zona rural de Viotá.

Alias Menudencias dijo que las cuatro personas fueron recogidas en una camioneta y que en el hecho participaron, entre otros, el sargento del B2 de Fusa Fredy Espitia, usando distintivos del DAS: “Los degollamos y luego los descuartizamos, con machete. Hicimos dos fosas, dos huecos pequeños, por ahí de 50x50 a la altura del pecho, por ahí a 1,50 metros. Partidos en seis pedazos, cabeza, brazos, piernas y tronco, se le abría el tronco”.

Los exparamilitares Héctor Díaz y alias Menudencias fueron condenados por este crimen el 14 de abril de 2023 por el Juzgado Segundo Penal del Circuito de Fusagasugá. La Fiscalía ya abrió una indagación previa que deberá determinar si el ciclista Lucho Herrera tuvo o no participación en estos hechos, como alegan los exparamilitares.