Radiografía del vapeo en Colombia: consumo se concentra Bogotá, Caldas, Antioquia y Boyacá

Este año fue aprobada la ley que regula el uso de vapeadores en Colombia. El propósito de esta iniciativa es prevenir la iniciación de no fumadores y jóvenes; por ello, se prohibió su venta a menores de 18 años, su utilización en espacios cerrados, publicidad en redes sociales y medios de comunicación, entre otras medidas.

A raíz de la aprobación de esta ley, la Liga Colombiana contra el Cáncer lanzó la campaña Desvapeate, tu salud no es un juego, cuyo fin es formar líderes estudiantiles de colegios departamentales de todo el país, que orienten, acompañen y sensibilicen a los niños y adolescentes sobre el impacto negativo de vapear, cómo pueden dejar de hacerlo y prevenir el uso temprano de estos dispositivos.

Durante el mes de mayo, se llevaron a cabo mesas de trabajo y talleres de sensibilización en diferentes colegios distritales y departamentales a nivel nacional, donde se convocó a niños y adolescentes para hacer parte de comités de convivencia y capacitarlos sobre el peligro de los vapeadores para la salud, las sustancias tóxicas que los componen y la contaminación ambiental que generan.

¿Cuáles son las cifras de vapeo en Colombia?

Según un estudio publicado en el Jornal Brasileiro de Pneumologia, basado en datos de la Encuesta Nacional sobre Consumo de Sustancias Psicoactivas (ENCSP) de 2019 y del Sistema de Información de Prestaciones de Salud (RIPS) de 2020 a 2022, se encontró que entre 2020 y 2022 se presentaron 245 casos de enfermedades relacionadas con el vapeo y 59 muertes asociadas, con una prevalencia de consumo del 4,37 por ciento.

(Respecto a estas cifras, en su momento, la Asociación de Empresas de Productos Alternativos Libres de Combustión (AlterPro) emitió un comunicado en el que se refirió al estudio, señalando que  la información que se presentó en el análisis, es "imprecisa", carece de un "sustento concluyente"). 

También, el estudio reveló que el consumo habitual de cigarrillos electrónicos en el país está concentrado en Bogotá, Caldas, Antioquia, Valle del Cauca y Boyacá, con un 60 por ciento de consumidores adultos jóvenes (personas alrededor de los 45 años).

Además, los territorios que reportaron un mayor número de muertes son:

• Antioquia (69 por ciento)
• Boyacá (27 por ciento)
• Sucre (1,69 por ciento)
• Tolima (1,69 por ciento)

Por otra parte, el Estudio nacional de consumo de sustancias psicoactivas en población escolar durante 2022, que hizo el Observatorio de Drogas del Ministerio de Justicia, advirtió que el 22,7 por ciento de los estudiantes de colegios del país, entre 12 y 17 años, han fumado con vaporizador o dispositivos electrónicos al menos una vez. El estudio mostró que solo el 11,1 por ciento han fumado cigarrillo o tabaco tradicional.

¿Los cigarrillos electrónicos son populares entre los jóvenes universitarios de Bogotá?

Los resultados del estudio Prevalencia y Factores Psicosociales Asociados al Consumo de Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina en Población Universitaria de Bogotá evidenciaron que el 37,8 por ciento de los estudiantes de pregrado han usado cigarrillos electrónicos alguna vez en la vida, con una prevalencia mayor en hombres (49,4 por ciento) que en mujeres (31,5 por ciento).

Este mismo estudio señala que el 48 por ciento de los universitarios afirmaron haber probado el cigarrillo electrónico antes de los 19 años; el 5 por ciento aseguró haber agregado cannabis a sus cigarrillos electrónicos; y el 26,7 por ciento dijo haber consumido cigarrillo convencional en los últimos 30 días.

¿Por qué los jóvenes deben evitar el uso de vapeadores?

Según la Liga Colombiana contra el Cáncer, los cigarrillos electrónicos, además de la nicotina, pueden contener sustancias potencialmente dañinas y tóxicas, como metales pesados, plomo, compuestos orgánicos volátiles y agentes cancerígenos; e incluir aditivos, sabores y productos químicos que pueden representar riesgos para la salud de las personas.

"Incluso, el vapor generado por los cigarrillos electrónicos no es simplemente agua; de hecho, contiene sustancias químicas nocivas y partículas muy finas que pueden ser inhaladas hacia los pulmones y, posteriormente, exhaladas al medio ambiente", dice un comunicado de la liga.

La Sociedad Colombiana de Pediatría explica que el consumo de estos dispositivos causa daños importantes en la salud, dado que la nicotina afecta el desarrollo de los circuitos neuronales que se encargan del control de la atención y el aprendizaje, y su uso "se asocia con problemas de internalización, depresión, tendencias suicidas, trastornos alimentarios, problemas de externalización, trastorno de hiperactividad con déficit de atención, trastorno de conducta, impulsividad y estrés percibido".