"Estaríamos en un escenario de recesión si no fuera por el esfuerzo del sector financiero”: Jonathan Malagón

El presidente de la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia (Asobancaria), Jonathan Malagón, aseguró que aunque el sector viene presentando unas de sus peores cifras históricas, las medidas en materia de tasas han ayudado a la economía nacional. 

“El año pasado fue uno de los años más difíciles de la historia para la industria. Este sector tiene 101 años, y en estos 101 años el registro de cartera del año pasado fue el cuarto peor. Solamente estuvo por encima, hablando de una situación compleja, de la crisis del 99, la crisis del 82 y el desplome del 68”, indicó el presidente de Asobancaria. 

Malagón mencionó que ocho de los 30 bancos registraron pérdidas el año pasado, y estas pérdidas ascendieron de manera conjunta a 2 billones de pesos. De los 67 establecimientos de crédito de Colombia, 23 registraron pérdidas. Estos resultados, según Malagón, están asociados en parte con “una decisión autónoma” que tomó el sector el año pasado el sector. 

“Conforme iba subiendo la tasa de interés del Banco de la República, lo que hizo el sistema para apoyar la reactivación y para que la economía no decreciera fue bajar la tasa de interés. El año pasado, mientras subía la tasa del Banco de la República y subía la tasa de captación, la tasa de colocación de créditos cayó 550 puntos básicos (5,5 por ciento)”, explicó Malagón. 

Según estimaciones del gremio bancario, si los bancos no hubieran bajado sus tasas de interés el año pasado, el crecimiento de la economía no hubiera sido 0,6 por ciento, sino negativo. 

“Con ese resultado de los bancos indirectamente y de forma deliberada se subsidió la evasión de un escenario recesivo. Estaríamos en un escenario de recesión si no fuera por el esfuerzo del sector financiero”, aseguró Malagón.

El presidente de Asobancaria defendió que, a pesar de haber tenido un mal año, eso no quiere decir que el sector está en crisis ni el país está cerca a una crisis financiera. “Un mal rendimiento en utilidades no quiere decir que tengamos, siquiera, posibilidad de que se quiebre un banco”, dijo.