La economía del pan de 5.000 pesos
11 Mayo 2023

La economía del pan de 5.000 pesos

CAMBIO habló con una "verdadera experta en pan" ;) para saber por qué está tan caro este producto, cómo compiten con la industria del maíz y el efecto de la Ley del Sodio en las panaderías. El caso del pandebono, por ejemplo, es crítico.

Por: Angélica M. Gómez

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Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), en abril la inflación mensual del pan fue de 0,99 por ciento. En lo corrido del año, el precio de este producto ha subido 7,22 por ciento y si se le compara con el valor de abril de 2022, el incremento es de dos dígitos: 25,41 por ciento.

Aunque en algunos lugares todavía se encuentra el famoso pan de 500 pesos, hay varios factores nacionales e internacionales que han llevado a que el popular producto complete año y medio de incrementos en su precio y de contribuir al alza de la inflación.

Marcela Morales, presidenta de Adepan, el gremio panadero, explica que la tendencia de desaceleración del índice de precios al consumidor (IPC) todavía no se refleja en el sector, porque la mayoría de sus materias primas son importadas y todas se compran a largo plazo, lo que significa que todavía se vende producción hecha con harina y otros ingredientes comprados con precios y dólar altos. 

“En los dos últimos años, desde octubre de 2021 a hoy, hemos tenido alzas reiterativas de las materias primas e, incluso, se ha doblado el valor de muchas de ellas. A eso se ha sumado, por ejemplo, que hay escasez de la harina de almidón de yuca, con la que se hace el pandebono. Todo esto también jalona el aumento de precios de los productos y los panaderos han hecho esfuerzos muy grandes por mantener el negocio, pero indudablemente ha tocado subir el precio final al consumidor, que no está acostumbrado a ese tipo de alzas y menos a que sean reiterativas”, dice Morales.

En el caso del trigo para hacer harina, todavía se está utilizando trigo comprado con el dólar alto de los meses pasados por lo que la proyección de Adepan es que este tipo de harina mantendrá su precio alto hasta finales de este año. 

Y es que según el Dane, en abril el trigo y sus derivados reportaron una inflación anual de 32,74 por ciento que contribuyó a que la inflación del pan fuera de 25,41 por ciento y la de otros productos de panadería llegara a 17,07 por ciento. 

Al incremento en los precios de las materias primas se suma la inflación de los servicios públicos domiciliarios, registrada por el Dane dentro del grupo de alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles, que llegó en abril a 8,03 por ciento anual y 1,15 por ciento mensual. 

Desde el primero de enero también volvió el impuesto al consumo para las panaderías, un costo más para los consumidores.

Otras harinas

La harina de almidón de yuca, insumo básico para otra serie de productos típicos de panadería, también ha subido su precio en los últimos meses pese a que la yuca para consumo de los hogares reportó en abril la tendencia contraria. 

Esto se debe, dice Morales, a que “al parecer han disminuido los cultivos de yuca, los productores han decidido irse a otro tipo de productos, a otro uso de la tierra”. La situación ha llevado a que el gremio esté planeando reunirse con el Ministerio de Agricultura a “revisar pronto hacia dónde son los planes de sostenibilidad de este alimento”.

En el caso del maíz, la dirigente gremial indica que este producto, al ser importado en su mayoría, también ha presentado alzas de precios que afectan a sus productos derivados como la arepa. Y en todo caso, no es una competencia para el pan, que se encuentra con mayor facilidad en los barrios y todavía a un menor precio. 

“Son productos muy distintos porque para consumir maíz tienes que tener un negocio distinto, una oferta distinta, mientras que el pan por disponibilidad está en cualquier rincón de la geografía colombiana, todas las horas del día, y todavía se puede conseguir un pan de 500, 600 pesos, tal vez 700. Una arepa es algo más complejo de conseguir, porque tiene que estar hecha al momento y va a requerir de otro tipo de negocio”, agrega Morales. 

La Ley del Sodio

Por otro lado, a los panaderos también les afecta la Ley del Sodio en mayor medida que a los productores industriales de pan, que tienen la capacidad de investigar y adaptar sus procesos de producción para cumplir con la norma.

Al respecto, Morales dijo que “en  el caso de la panadería, pues la panadería de barrio o artesanal, sí tiene unos límites de sodio que ya son muy bajos. El gremio está trabajando en ver qué va a pasar con eso, muy probablemente se reformulen algunos productos, pero sí es una normatividad que ya se tiene que estar cumpliendo”.

Es decir, es probable que si va a su panadería de confianza, no solo se encuentre con que le van a cobrar más por el pan de siempre, sino que su sabor podría ser diferente por una adaptación del producto a la famosa Ley del Sodio.

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