Deforestación se redujo en 2023, pero se dispararía en 2024 por cuenta de El Niño y grupos armados

Desde noviembre de 2023, la ministra de Ambiente, Susana Muhammad, informó que los dos grandes retos para enfrentar la deforestación tenían que ver con el comportamiento del fenómeno de El Niño y los avances de la Paz total. Como una profecía, los datos entregados por la alta funcionaria este 8 de abril muestran que en 2024 estos dos serían los causantes de un incremento abrupto en la destrucción de los bosques del país.

Los números son claros. Según Muhammad, el primer trimestre de 2024 muestra una tendencia al alza en la deforestación en el Meta y Caquetá, entre otros. El incremento identificado en los primeros meses del año es de 40 por ciento, en contraste con el mismo periodo en 2023. 

"Desde octubre del año pasado, hasta este periodo, después de nosotros haber recuperado la confianza del campesinado de los tres departamentos (Meta, Caquetá y Guaviare), empezó una disputa territorial con el EMC, por la legitimidad frente al campesinado. También nos han reportado que se está restringiendo la entrada a los funcionarios del Sistema Nacional Ambiental y que, de octubre para acá, esta situación ha empeorado", sostuvo la ministra en una rueda de prensa.

Muhammad denunció el asesinato de un líder de Junta de Acción Comunal, el de otro líder de una comunidad indígena, amenazas en contra de comunidades de la región y trabas para el trabajo de los servidores del Sistema Nacional Ambiental, entre otras situaciones graves para la seguridad de las personas.

La Amazonia colombiana sufrió un aumento puntual de 41 por ciento de incremento en deforestación entre octubre, noviembre y diciembre de 2023, traducido en 18.400 hectáreas, frente a los mismos meses en 2022. Caquetá, Meta y Guaviare son los más afectados, en contraste con Putumayo, en donde disminuyó la deforestación en 1.976 hectáreas.

Por esto, es posible que el resultado consolidado de la reducción de la deforestación en 2023 sea de entre 25 y 35 por ciento, aunque se esperaba que fuera del 49 por ciento. 

"En este caso se está poniendo la naturaleza en la mitad del conflicto y esto es una violación al derecho internacional humanitario en el que, claramente, las afectaciones al medioambiente están prohibidas como forma de presión armada", añadió.

Con todo, el Gobierno se comprometió a reforzar el trabajo con las comunidades, el Consejo Nacional de Lucha Contra la Deforestación (Conaldef) y llevará a cabo otras acciones para enfrentar este daño ambiental.