La extorsión, un mal endémico para el que no aparece cura
29 Enero 2023 03:01 am

La extorsión, un mal endémico para el que no aparece cura

Crédito: Ilustración: Yamith Mariño Díaz

Durante 2022 aumentaron las denuncias de extorsión en Colombia, especialmente en ciudades intermedias. Fueron reportados 9.243 casos, un 11 por ciento más que en 2021.

Por: Javier Patiño C.

Entre aquí para recibir nuestras últimas noticias en su WhatsAppEntre aquí para recibir nuestras últimas noticias en su WhatsApp

A finales de 2022, Ricardo Garzón, ingeniero agrícola que trabaja en Yopal, Casanare, recibió la llamada de una persona que lo buscaba para que revisara un cultivo de varias hectáreas de arroz amenazado por una plaga, en el municipio de Orocué. Garzón fue sincero: "Estoy ocupado, pero le puedo recomendar a un compañero que puede ir a la finca y hacerle un diagnóstico". Su interlocutor estuvo de acuerdo: "Lo importante es que la cosecha no se pierda".

 

El colega aceptó el encargo, pero al llegar a la finca que supuestamente iba a inspeccionar, ubicada a más de una hora de Orocué, cuatro hombres le salieron al paso. Se identificaron como integrantes de las disidencias de las Farc y lo obligaron a entregar el celular. Uno de los delincuentes llamó a la familia del ingeniero y le exigió consignar cuatro millones de pesos a cambio de la vida del profesional. Una hora después, el ingeniero fue dejado en libertad. Desesperado, intentó comunicarse con su esposa, pero las dificultades de señal se lo impidieron. Solo se enteró cuando llegó a la casa: su esposa había consignado los cuatro millones de pesos y se alegraba de que fuera cierto que lo hubieran dejado en libertad. 

Al acercarse a las autoridades de Yopal a denunciar lo sucedido, el ingeniero Garzón se encontró con que varias personas más habían sido extorsionadas de la misma manera en esa zona del departamento.

Según le informaron en el Gaula de la Policía local, se trata de una modalidad de extorsión utilizada por una banda de delincuentes que se hace pasar por disidentes de las Farc: convencen a los familiares de que se trata de un secuestro y los obligan a consignar determinada cantidad de dinero, a cambio de la vida del retenido.

Extorsiones a diestra y siniestra

Cobrar plata porque sí, bajo amenazas de muerte u otra suerte de retaliaciones, es un mal endémico en Colombia que está lejos de encontrar cura. La frecuencia del delito, la agresividad con que se comete y la ausencia del Estado han convertido a la extorsión en una triste costumbre a la que miles de empresarios y familias se han resignado con impotencia para sobrevivir o, al menos, simular algo de paz. La extorsión afecta la integridad física, la libertad individual y colectiva y la propiedad privada; acaba con la dignidad de las personas y deshace el tejido social de las comunidades. Y, sin embargo, crece como la espuma. 

Según datos del Sistema de Información Estadístico, Delincuencial, Contravencional y Operativo (Siedco), de la Policía Nacional, en el último año se ha presentado un aumento en los casos de extorsión en varias ciudades del país. El Gaula de la Policía ha detectado que en ciudades como Bogotá, Villavicencio, Barranquilla y Tuluá, las bandas criminales y otras organizaciones ilegales han incrementado la presión contra ciudadanos inocentes que en muchos casos terminan pagando para proteger a sus familias.

extorsión

En 2022 aumentaron las denuncias de los ciudadanos. En total se reportaron 9.243 casos, contra los 8.342 de 2021, lo que se traduce en un aumento del 11 por ciento.

extorsión

Según un estudio realizado por el centro de pensamiento Futuros Urbanos, seis de las diez ciudades principales de Colombia tuvieron un alza en sus tasas de extorsión en los últimos cinco años. La mayoría de los casos ocurrieron en Villavicencio, Barranquilla, Quibdó, Tuluá y Cartagena.

“Es muy posible que exista un subregistro muy alto en las denuncias, porque las víctimas de esta actividad delictiva tienen temor a perder la vida, o por las mismas represalias que pueden ejercer los delincuentes contra ellos o sus familiares”, asegura el informe.

Los responsables de las extorsiones son bandas criminales que se dedican al cobro por préstamos gota a gota y al microtráfico que amenazan a comerciantes y residentes, a vendedores ambulantes; todo con el fin de obtener un beneficio económico a través de la intimidación y la violencia.

Lo que más ha llamado la atención de las autoridades es la manera en que operan, por ejemplo, las disidencias de las Farc. Mientras que en Nariño, Cauca y Valle del Cauca controlan a las bandas criminales para que no extorsionen a los ciudadanos, en el oriente del país son ellas mismas las que obligan a comerciantes, ganaderos y ciudadanos a pagar mensualmente una cuota para la libre movilidad y como aporte a la lucha guerrillera.

Los casos de extorsión fueron especialmente representativos durante el mes de marzo de 2022, cuando el país se preparaba para las jornadas de elección de congresistas. Las cifras aumentaron en la medida en que se acercaban las elecciones presidenciales. El punto más alto de denuncias llegó en octubre, ya con Gustavo Petro en el poder, y luego hubo un leve descenso a final de año.

cifras extorsion

Modalidades de extorsión

El Gaula de la Policía y Militar han detectado varios modalidades de extorsión en el país. La principal es el llamado "falso servicio", que consiste en que los delincuentes realizan una llamada a las personas que prestan un trabajo profesional y las contratan para hacer una labor fuera de la ciudad; al llegar, se dan cuenta de que el lugar no existe. En ese momento, reciben la llamada de alguna persona que se identifica como un grupo al margen de la ley, que los amenaza y obliga a llamar a las familias para decirles que los tienen secuestrados y que tienen que pagar por el rescate.

Otra de las modalidades es la llamada carcelaria. En este caso, los internos llaman a sus víctimas haciéndose pasar como grupos al margen de la ley para hacer exigencias como material de intendencia, comunicaciones y drogas, entre otras. Como algunas de estas cosas son imposibles de conseguir para algunas víctimas, las amenazan para que consignen altas sumas de dinero.

Las bandas criminales también utilizan el llamado "secuestro exprés": llaman a las víctimas para hacerse pasar por un hijo u otro familiar que supuestamente ha sido secuestrado y golpeado, para obligarlas a que pague por el rescate.

En los últimos años, las redes sociales, en especial Facebook y Whatsapp, han sido utilizadas para tratar de estafar o extorsionar a los usuarios a través de la suplantación de la identidad, haciéndose pasar por un amigo o pariente, presuntamente en problemas, para pedir dinero.

La ciberextorsión ha tenido un gran aumento después de la pandemia. La información personal de los usuarios es utilizada por los delincuentes para usar perfiles falsos y engañar a sus víctimas y sacarles información, que utilizan después para extorsionarlos al decirles que tienen fotos o videos comprometedores.

También está el llamado "sexting", que se camufla en especial en páginas de adultos. Aquí la víctima accede a enviar fotos de su cuerpo desnudo a su pareja. El juego cambia cuando el bandido logra acceder a las imágenes, lo intimida y lo amenaza con publicar las fotos si no consigna cierta suma de dinero. 

El llamado de las autoridades es evitar caer en las trampas y denunciar cualquier hecho en que se busque presionar con fines económicos. “Muchas veces publicamos en redes sociales información valiosa para el hampa. El delincuente puede tener en internet el nombre de su víctima, el número de cédula, la dirección, el nombre del negocio, y luego le hace creer a su víctima que sabe todo de él”, asegura el mayor Mauricio Medina, jefe de la unidad de prevención del Gaula Militar.

Para el alto oficial, las personas creen que con ceder a las pretensiones de los bandidos solucionan el problema, pero es al contrario. Es como un circulo vicioso.”Cuando el ciudadano paga, lo que hace es seguir con la cadena de extorsiones que aumenta el negocio”, concluye el mayor Medina.

 

Conozca más de Cambio aquíConozca más de Cambio aquí