Taxistas y conductores de aplicaciones: por qué fue la batalla campal en la Avenida El Dorado

En la noche del martes 16 de abril, una protesta liderada por taxistas en cercanías del Aeropuerto El Dorado terminó en disturbios y enfrentamientos con conductores de aplicaciones de transporte. Las autoridades debieron intervenir en la zona y despejar la Avenida El Dorado.

La concentración comenzó alrededor de las cinco de la tarde en las vías cercanas a la terminal aérea, y con el pasar de las horas, el tráfico se vio afectado tanto en la calle 26, como cerca de la terminal de El Salitre, donde también se reportaron bloqueos.

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La protesta se extendió a ambas calzadas de la Avenida El Dorado y aproximadamente 12 rutas de buses urbanos del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) tuvieron que desviarse, según reportó la Secretaría de Movilidad de Bogotá.

Al lugar llegaron motociclistas que trabajarían en aplicaciones de transporte y alrededor de las siete de la noche se produjeron altercados que desencadenaron enfrentamientos violentos con los manifestantes. Según reportaron Caracol Radio y la FM, se registró un herido a causa de objeto contundente, quien tuvo que ser atendido por la Secretaría de Salud.

 ¿Por qué se dieron las riñas? 

Los taxistas bloquearon el acceso al Aeropuerto El Dorado en protesta contra el uso de vehículos particulares para transportar personas por medio de aplicaciones digitales de transporte como Uber y Didi. El gremio considera que esto es competencia ilegal y desigual.

Los taxistas afirmaron que, a pesar de múltiples solicitudes a la Alcaldía y al Gobierno para prohibir estas plataformas, no han obtenido una respuesta satisfactoria. 

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Según denuncias de usuarios en redes sociales, las riñas habrían empezado porque los taxistas no dejaban circular a ningún carro particular hacia el aeropuerto, sin importar si eran o no trabajadores de aplicaciones. Además, sacaban a los pasajeros de los vehículos, obligándolos a quedarse o caminar hasta el aeropuerto con sus maletas. 

El bloqueo en la importante vía se mantuvo por más de tres horas, causando graves retrasos y molestias a los viajeros, lo que llevó al alcalde Carlos Fernando Galán a enviar refuerzos de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (Undmo), antiguo Esmad, para dispersar a los manifestantes.

"En Bogotá nadie va a bloquear el aeropuerto ni vamos a permitir que nadie distinto a las autoridades competentes habilitadas por la ley haga retenes o inspecciones", declaró Galán en la mañana siguiente.