
Artes plásticas en las galerías y también en el cine
'The Chrystal Palace' (1871), de Camille Pissarro.
Mucho para ver este fin de semana. Retrospectiva de Emma Reyes, exposiciones colectivas de arte contemporáneo y de artistas de comunidades indígenas. Además, Daniel Virviescas presenta en Casa Cuadrada 'Homo homini lupus'. Y, para no perderse, el documental Camille Pissarro, el padre el Impresionismo.
Por: Redacción Cambio

'Las caras de Emma Reyes' en galería La Cometa
En la galería La Cometa de Bogotá se presenta la muestra Las caras de Emma Reyes, una selección de más de cincuenta obras de la colección de la Fundación Arte Vivo Otero Herrera que la artista pintó durante las décadas de 1980 y 1990. Estas obras se inspiran en sus observaciones cuando viajó a los países andinos y en ellas se aparecen los procesos de confección de tejidos, la vegetación exuberante y los rostros de indígenas y campesinos.
La publicación del libro Memoria por correspondencia, hace poco más de una década, dio a conocer entre públicos amplios la figura de Emma Reyes, un nombre que le era familiar más que todo a pintores y artistas, sobre todo aquellos que habían ido a estudiar o trabajar a Francia, donde ella vivió desde comienzos de la década del 60 hasta su muerte en 2003. Reyes fue, por decirlo de alguna manera, la madrina de artistas como Patricia Tavera, Darío Morales o Gustavo Vejarano entre tantos otros. Memoria por correspondencia, que compila cartas que le envió a Germán Arciniegas entre los años 60 y 70, registra sus recuerdos de una infancia terrible. Pero eso no fue todo. En los años 40 viajó por tierra desde Colombia hasta Argentina, comenzó a pintar de manera autodidacta hasta que la becaron en París para estudiar en la academia de André Lhote. También fue asistente de Diego Rivera y Lola Álvarez Bravo en México en los 50.
Su obra no tuvo en Colombia la repercusión que merecía. Gracias al libro, y también la serie de ficción Emma Reyes, que realizó Señal Colombia y que se puede ver en la plataforma RTVC Play.

'Movilización' en Casa Hoffman
Movilización reúne piezas de artistas visuales que cuestionan la manera como circulan sin contexto muchas imágenes y consignas de concentraciones populares. Algunas articulan tradiciones, prácticas culturales y etnicidad a través de sonoridades e imágenes como expresiones de solidaridad. Otras señalan gestos asociados a la memoria personal que activan formas de conmemoración colectiva, gremial o popular. Un grupo adicional corresponde a vinculaciones entre producción creativa y movilizaciones sociales contemporáneas; y otras asumen las prácticas artísticas como agenciamientos culturales dispuestos a indagar los procesos y paradojas de la organización social.
En Colombia, hace 50 años, dos iniciativas artísticas describieron la relación entre arte y movilización social: el Taller Causa Roja, que promovió la auto representación a través de la educación popular y acciones como la huelga en Vanitex, y el Frente Cultural del MOIR, que creó la categoría de “trabajadores del arte revolucionario” para darle un nuevo significado al papel del artista en su práctica política. Tras aquellas experiencias históricas, esta curaduría señala expresiones de movilización en algunas prácticas artísticas contemporáneas.
Casa Hoffmann
Cra. 2 A # 70 -25
Hoy viernes 27 de septiembre habrá una visita guiada de 9:00 a.m. a 1:00 p.m. como parte de ña propgramación de ArtBo.
Abierta al público hasta el sábado 19 de octubre de 2024.
Colectiva de artistas inga y kamëntsá del Putumayo
La Fundación Nancy Kotal de Cortés, con el apoyo del Centro Colombo Americano de Bogotá, presenta Samay, soplo de aliento, una exposición que reúne a once artistas de las comunidades Inga y Kamëntsá del Valle de Sibundoy, Putumayo. La obra de Gerardo Chasoy, Marcelino Chasoy Juajibioy, Benjamín Jacanamijoy, Luis Eduardo Jajoy, Luar Guerrero, Eliana Muchachasoy, Isidro Muchavisoy, Sebastián Paz Coral, Jazmín Revelo, Dalid Rosero, Fabián Alexander Tandioy y Ayda Lorena Jamioy, los 11 artistas que participan con su obra, giran en torno a la dentidad cultural y étnica, cosmovisión y saberes ancestrales, cuidado y protección del medio ambiente del piedemonte amazónico.
Samay es una palabra quechua, que significa suspiro y, para el pueblo Inga del Valle del Sibundoy, soplo de aliento. En enero de 2024, con apoyo de la dirección cultural del Centro Colombo Americano de Bogotá, la curadora e investigadora Paola Camargo emprendió un viaje a Colón, Santiago, Sibundoy y San Francisco, los cuatro municipios del Valle del Sinbundoy en el Putumayo.
En el valle los kamëntsá o kamsá y los inga, palabra que significa "allegados". La mayoría de artistas que harán parte de esta muestra son jóvenes. El interés de la curaduría es dar visibilidad a artistas de una nueva generación que no hacen parte del circuito artístico. La mayoría de ellos tienen formación universitaria y han regresado a vivir al Valle de Sibundoy una vez finalizados sus estudios, debido a su arraigo cultural y territorial.
Samay, soplo de aliento combina la presencia de técnicas como el tallado en madera con el grabado, la serigrafía, la ilustración y la pintura. Arte y artesanía no están separados, como en el mundo blanco mestizo. “Me gustaría como curadora que el público pueda ver la diversidad de técnicas, el alto nivel de ejecución de estos artistas, así como la pertinencia y profundidad de sus reflexiones en torno a la vida. Espero que los asistentes puedan conocer y apreciar la riqueza artística y cultural de las y los jóvenes artistas del Valle del Sibundoy, quienes van acompañados de un par de maestros de mayor trayectoria haciendo un diálogo intergeneracional”, indica Paola Camargo, curadora de la exposición.
Samay, soplo de aliento
Centro Colombo Americano, sede Centro
Calle 19 # 2- 49, Bogotá
Lunes a viernes 10 a.m. a 6 p.m., sábado: 10 a.m. a 4 p.m.
Abierta al público hasta el 9 de noviembre.

'Homo homini lupus', arte del absurdo y subversión de lo Infantil, en Casa Cuadrada
En Homo homini lupus Daniel Viviescas reúne 30 obras donde combina la abstracción y la figuración para explorar la complejidad de la naturaleza humana. A través de estas piezas el artista bumangués busca representar la lucha interna y los conflictos que definen la existencia y el estado de vulnerabilidad que generan.
Homo homini Lupus es una alusión a la idea de que el hombre puede llegar a ser su peor adversario. Esta frase, tomada de la filosofía de Thomas Hobbes, refleja la naturaleza conflictiva y a menudo destructiva que puede surgir en las relaciones humanas. La exposición explora estas tensiones y examina la influencia de ídolos y figuras de autoridad, la política y la búsqueda de aprobación en nuestras vidas. Cada figura de Viviescas refleja una lucha entre la inocencia y el poder, la fragilidad humana transformada en arte. Las criaturas híbridas de Viviescas revelan los traumas y temores más profundos y otras emociones.
“Tras una década trabajando a puerta cerrada y más de 19 años de trayectoria, Daniel Viviescas nos trae un universo visual que reflexiona sobre las relaciones humanas, los mecanismos de poder y la construcción de identidades en una sociedad marcada por el consumo y la cultura de masas. A través de un lenguaje orientado por un notorio sello personal, el artista subvierte lo cotidiano, satiriza lo político e indaga en las ficciones que construyen nuestros imaginarios culturales para invitar al debate sobre aquello que se nos ha presentado como incuestionable”, afirma Laura Páez, curadora e historiadora.
Galería Casa Cuadrada
Cra. 7 # 84-36, Bogotá
Hasta el 19 de octubre
Camille Pissarro, precursor del Impresionismo, en el cine
Señalan los expertos en historia del arte que sin Camile Pissarro (1830-1903) no existiría el Impresionismo. Por eso se le conoce como el padre de este movimiento que transformó por completo el devenir del arte moderno.
Pissarro influyó de manera definitiva en la obra de maestros como Claude Monet, Paul Cézanne y Paul Gauguin. Además fue uno de los primeros pintores que se atrevió a salir del espacio rígido de las aulas académicas y del taller del artista para trabajar en exteriores.
Esta producción registra la primera gran retrospectiva de Pissarro en más de 40 años. Se filmó en el Museo Ashmolean de Oxford, que cuenta con un gran archivo de sus obras y correspondencia, lo que permite ofrecer una mirada única a su legado. Aquí se destaca una colección única de paisajes y su incursión en el Puntillismo. A la experiencia inmersiva en sus pinturas se suman aspectos más íntimos del artista como la revelación de las cartas que Pisarro le envió a su familia.
En salas de Cine Colombia de diferentes ciudades el país los días 27, 28, 29 y 30 de septiembre.
