Cuatro chefs colombianas llevarán sus menús a vuelos internacionales

Cubios, maíz, longaniza, manzana de agua, y envueltos no son ingredientes comunes en la comida de avión, incluso si se viaja en clase ejecutiva. Sin embargo, cuatro chefs colombianas están llevando platos con estos ingredientes a los viajeros de vuelos desde Bogotá hacia tres destinos internacionales. 

Natalia Cocomá, Carmen Ángel, Antonuela Ariza y Miriam Armenta son chefs de regiones y estilos culinarios diferentes. Ellas crearon menús especiales para que durante el próximo año los viajeros de Latam Airlines puedan probarlos en la ruta Bogotá-Madrid en la cabina ejecutiva y en clase económica, y en los vuelos Bogotá-Miami y Bogotá-São Paulo en la categoría premium economy. 

Cada una de las chefs tendrá su propuesta culinaria a bordo durante tres meses y hacen parte del programa ‘Sabores que transportan’, un esquema gastronómico que implementó la aerolínea con chefs locales desde el año pasado en Brasil, Chile y Perú, y que empezó en Colombia el pasado primero de julio. La iniciativa busca darles visibilidad a mujeres chefs que están en pleno crecimiento en la escena gastronómica y al mismo tiempo tiene como objetivo enriquecer la experiencia a bordo de los pasajeros con sabores suramericanos. 

Natalia Cocomá, restaurante ODA

Natalia Cocomá es la chef ejecutiva del restaurante ODA, ubicado en Bogotá, y el cual entró recientemente en el listado de los mejores restaurantes de América Latina en el puesto 99. La joven tolimense tiene 26 años, es cocinera y también música. 

Su plato, el primero que encontrarán los viajeros a bordo entre julio y septiembre de 2024, está inspirado en Boyacá y se compone de un cerdo asado en su salsa, espuma de maíz, manzana de agua asada, cubios y maíz crocante. 

“Ha sido un proceso muy bonito. Colombia tiene mucho que ofrecer. A través de cada una se pueden conocer sabores y técnicas diferentes”, dice la cocinera.  

Uno de los grandes retos para las cuatro fue adaptar sus platos y sus procesos a una sola cocción para servirse a más de 9.000 metros de altura. 

“Primero tuvimos que entender la operación de la aerolínea, pensar en cómo hacer para que los sabores se mantengan y que la técnica no cambie. Implicó probar los ingredientes, transformarlos, y que el chef de Latam los aprobara. Yo ejecuto la receta, el proceso, doy mi aprobación de sabores, pero quien se encarga de la operación es la aerolínea con su restaurante y su chef”, mencionó Natalia a CAMBIO. 

Antonuela Ariza, restaurante Mini-mal

La chef bogotana Antonuela Ariza está al frente de Mini-mal, un restaurante con 23 años de historia ubicado en Chapinero, y también es el cerebro gastronómico de la heladería Selva Nevada. 

Su plato está inspirado en el Caribe, la región en la que creció su mamá: un pollo guisado en leche de coco, ají dulce y cebolla morada, acompañado de boronía –un puré de berenjena ahumada con plátano maduro– zapallo y habichuela. 

“Fue un reto adaptar el plato a un vuelo, entender los ingredientes y las maneras de cocción. Es una manera diferente de contar historias de América Latina y sus sabores, no solo de Colombia, a través de la cocina”, dijo. 

Carmen Ángel, restaurante Carmen

Aunque Carmen Ángel nació en Chicago (Estados Unidos) su cocina e inspiración las ha desarrollado desde hace más de 15 años en Medellín. Su madre es húngara, su padre colombiano, y esa mezcla explica su estilo culinario contemporáneo. Carmen es la cocinera y cofundadora del Grupo Carmen, compuesto por cinco restaurantes, uno de ellos con su nombre, que tiene sede en Medellín y en Cartagena. 

“Cuando uno viaja, la comida en los vuelos no suele tener identidad. Puede ser un pollo con arroz, una pasta, pero acá le estamos poniendo una identidad que representa nuestros sabores y nuestra región”, contó a CAMBIO. 

El plato de Carmen se compone por un morrillo en salsa de corozo, acompañado de un vinagre de plátano, achiote y arroz. “Tenemos sabores como ahuyama, hogao y raíz de cilantro. Es un plato con un concepto de comida de aprovechamiento, que caracteriza a muchos de nuestros platos populares en Colombia, que tienen mucho sabor y en los que nada se pierde. Es un plato que busca recordar la cocina del hogar”, contó la chef. 

Miriam Armenta, restaurante La cocina de Armenta

Miriam Armenta es cocinera de tradición. Cocina desde los 10 años lo que aprendió de su madre y su abuela y lleva 45 años en el oficio. Aunque nació en San Pablo, Bolívar, desde temprana edad se fue a vivir a Popayán, Cauca. Es la propietaria del restaurante La cocina de Armenta, ubicado en el centro histórico de la ciudad. 

“Mi plato está inspirado en el Cauca. A través de esta cocina buscamos revalorar y desarrollar un sentido de pertenencia en los colombianos. La cocina de tradición suele ser desvalorada, hemos perdido la identidad, pero es una cocina muy rica”, dijo. 

La cocina tradicional de Miriam se ve reflejada en el menú que le propuso a la aerolínea: un cerdo al horno bañado en su salsa, acompañado de un envuelto de mote con queso, pipián –la papa colorada típica del suroccidente colombiano–, y una longaniza artesanal.