Beatriz Gómez Consuegra, superintendente delegada para prestadores del servicio de salud y esposa del ministro Guillermo Alfonso Jaramillo, se declaró impedida para intervenir en ciertos asuntos del Hospital de Leticia, pero lo siguió haciendo, valiéndose del poder que le da su vínculo con el máximo jefe del sector. Existen documentos que muestran que ella reconoció su impedimento, que el superintendente nacional de salud lo aceptó y que en consecuencia nombró una funcionaria ad hoc para que tomara las decisiones en situaciones, como esta, en la que surgían conflictos de intereses por existir competencia concurrente. Es decir, porque era un asunto en el que tenían responsabilidad administrativa tanto el ministerio como la Superintendencia de Salud.
Los documentos que prueban esta situación fueron recolectados y analizados por la representante a la Cámara Catherine Juvinao y su equipo de trabajo.
Guillermo Alfonso Jaramillo se posesionó como ministro de Salud el 1 de mayo de 2023. Casi un año después, el 8 de marzo de 2024, la superintendente delegada Beatriz Gómez declaró su impedimento ante el entonces superintendente nacional de salud, Luis Carlos Leal, afirmando que “mi esposo se encuentra ejerciendo el cargo de Ministro de Salud y Protección Social, situación que materializa un potencial conflicto de intereses, habida consideración a que la funcionaria que tendría que adelantar los trámites internos en la Superintendencia, para gestionar la prórroga ejecutiva ante el aludido Ministerio, sería la suscrita servidora quien sostiene una relación familiar con el jefe de la cartera en salud”.
El superintendente Leal aceptó el impedimento y expidió una resolución en la que nombra como superintendente delegada ad hoc a Carolina Emilse Brijaldo Vega “exclusivamente para las actuaciones administrativas en las que se presente la competencia concurrente con el Ministerio de Salud y Protección Social de la prórroga ejecutiva para la Institución Prestadora de Servicios de Salud que se encuentra en medida de intervención forzosa administrativa para administrar a saber: ESE Hospital San Rafael de Leticia”.
La superintendente delegada –y esposa del ministro– sostiene que el impedimento declarado era para otros asuntos y no la imposibilitaba para presionar la firma inmediata de un contrato interadministrativo por 55.000 millones de pesos, para que la ESE Hospital San Rafael de Leticia adquiriera un buque hospital, que se pagará con fondos del ministerio que dirige su esposo.
Por eso, en una llamada telefónica que fue grabada, Beatriz Gómez le dijo a Mario Castro, asesor jurídico del hospital de Leticia:
–Ustedes firman hoy... o mañana me presentan la renuncia. Es más, de una vez.
Lina Baracaldo, la agente interventora del hospital, asegura que no podía firmar el contrato ese día porque el presupuesto total del proyecto no estaba asegurado. Sin esos dineros, la responsabilidad de sostener el barco recaería en las exiguas arcas del Hospital San Rafael de Leticia.
Las amenazas de la superintendente delegada se cumplieron. Cuatro días después de la llamada, el ahora superintendente nacional, Helver Guiovanni Rubiano, despidió a la interventora Lina Baracaldo.
La esposa del ministro reitera que no tiene impedimento para intervenir en este asunto. Dice incluso que la Procuraduría, que inició una indagación sobre su conducta, decidió esta semana avalar la construcción del buque hospitalario.
Sin embargo, hay un detalle que parece contradecirla. La resolución que remueve de su cargo a la agente interventora, afirma que no fue Beatriz Gómez quien actuó en este caso sino la funcionaria ad hoc que debía remplazarla cuando surgiera un impedimento: “El Superintendente Nacional de Salud acoge la recomendación del Comité de Medidas Especiales y de la Superintendente Delegada para Prestadores de Servicios de Salud ad hoc de remover a la doctora Lina Caterin Baracaldo Moreno”.
En el pie de página de la resolución, donde están los nombres de los funcionarios que revisaron el documento, no aparece la esposa del ministro; quien figura es la superintendente delegada ad hoc Carolina Emilse Brijaldo Vega.
Si la funcionaria ad hoc debe actuar exclusivamente cuando la doctora Beatriz Gómez esté impedida ¿por qué firma este documento?
P.D.: Además del eventual impedimento, las funciones de la superintendente delegada y esposa del ministro no le alcanzan para ordenar la firma del contrato del buque hospital.
