La reciente COP16 en Cali ha sido un claro recordatorio de la importancia de tomar decisiones inmediatas y de carácter global para frenar la pérdida de biodiversidad. En este espacio se discutieron nuevas propuestas que buscan movilizar recursos y compromisos para la conservación, entre ellas, las unidades de biodiversidad (también conocidas como créditos de biodiversidad), una herramienta innovadora que promete transformar la manera en que se financian los proyectos de conservación a largo plazo.