Daniel Quintero y Carlos Caicedo: se la juegan para ser los caciques progresistas
13 Octubre 2023 02:10 pm

Daniel Quintero y Carlos Caicedo: se la juegan para ser los caciques progresistas

Daniel Quintero y Carlos Caicedo prefirieron dejar sus cargos de gobernantes para tratar de impulsar las candidaturas enredadas de sus partidos. La mira está en tener una plataforma regional para pisar fuerte de cara a las presidenciales de 2026.

Por: Andrés Mateo Muñoz

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"Ojalá otro gobierno progresista nos suceda", dijo el presidente Gustavo Petro en la Plaza de Bolívar el pasado 27 de septiembre, día de las marchas en apoyo a las reformas que convocó el Gobierno nacional. El deseo del jefe de Estado dicho en voz alta fue pronunciado antes de que dos mandatarios locales decidieran renunciar para dedicarse a hacer campaña política: Daniel Quintero, exalcalde de Medellín, y Carlos Caicedo, exgobernador del Magdalena.

Aunque Caicedo y Quintero no han sido aliados ni socios en la política, sí los unen las circunstancias en las que prefirieron dejar sus cargos y no terminar sus periodos para meterse en la arena electoral. Por un lado, los dos tienen el rótulo de ser los candidatos presidenciales prematuros de sectores de izquierda buscando posicionarse desde ya como los defensores de la continuidad del proyecto del "cambio" de Gustavo Petro. 

"Medellín y el proyecto del cambio que hemos liderado necesitan ser defendidos", dice parte de la carta de renuncia escrita a mano que Daniel Quintero le envió al presidente Gustavo Petro.

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Mientras tanto, el exgobernador Caicedo dijo en su extensa carta al presidente: "renuncio para defender nuestras ideas políticas, para no darle paso a los de antes".

Por otro lado, tanto Quintero como Caicedo han conseguido ser los dueños de sus propios partidos políticos, en los que todo se hace a su imagen y semejanza. Independientes en el caso del exalcalde de Medellín y Fuerza Ciudadana en el caso del exgobernador. Los dos mandatarios explicaron que sus renuncias obedecen a la necesidad de salir a las calles a hacer campaña sin incurrir en faltas disciplinarias, que les valdrían sanciones de la Procuraduría. 

En todo caso, el hecho de que ni Daniel Quintero ni Carlos Caicedo entreguen sus cargos en enero de 2024 obedece a una combinación de ambiciones personales de llegar a la Casa de Nariño y la urgencia de rescatar de la debacle a los jóvenes partidos en los que tienen el poder

Daniel Quintero: a salvar a sus exfuncionarios

"Si Upegui no estuviera tan quedado en las encuestas, Quintero no habría renunciado", dijo una fuente en Medellín sobre la decisión del exalcalde y la enorme diferencia en los sondeos entre Federico Gutiérrez, líder solitario en las mediciones en Medellín, y Juan Carlos Upegui, exsecretario de la No Violencia de la administración Quintero que promete la continuidad.

Horas después de salir de La Alpujarra, Quintero se subió en la campaña de Upegui y prácticamente asumió como el candidato titular arengando ser el antídoto para el retorno del uribismo a la capital de Antioquia. "La única alternativa para derrotar al uribismo es Juan Carlos Upegui y no solo es la única alternativa, es la mejor alternativa”, dijo Quintero sobre su pupilo en su primera aparición en plaza pública como exmandatario.

La llegada de Quintero le dio cierto impulso a la candidatura de Upegui, pero sigue siendo insuficiente para alcanzar a Fico, que tiene una amplia ventaja apalancado en la imagen desfavorable del exalcalde y con prácticamente todos los sectores de derecha de su lado.

Eso sí, la jugada de Quintero en el tablero político de Medellín destrabó la adhesión del Pacto Histórico a la campaña de Upegui, que se había tardado casi tres meses en materializarse. La coalición de partidos y movimientos que llevaron a Petro a la presidencia confiaron más en Quintero que en Upegui y confirmaron la alianza el pasado 6 de octubre.

Los coqueteos entre el petrismo y Quintero empezaron incluso antes de conocerse la renuncia. Días antes de dejar su cargo, Daniel Quintero fue condecorado en el Congreso por parte de Andrés Calle Aguas, su aliado en Bogotá y presidente de la Cámara. También por esos días, varios congresistas del Pacto Histórico llenaron de elogios al exalcalde de Medellín en medio de polémicas por denuncias de cartelización en la alcaldía y su altercado con dos concejales. Al final, el petrismo no tuvo más opción que delegarle a Independientes la batuta de la izquierda en una ciudad en la que el Pacto Histórico sigue siendo una tendencia débil. 

Sin embargo, la correría nacional que inició el exalcalde para impulsar las candidaturas de las otras fichas de Independientes en distintas regiones del país parece haber fragmentado su relación con una parte del Pacto Histórico. Durante esta semana Daniel Quintero salió de Medellín y se dedicó a visitar Montería, Barrancabermeja y Cartagena. También se espera que aterrice en Cali. En su aparición en la capital de Bolívar, el exalcalde aseguró en una entrevista que Javier Julio Bejarano, que tiene el aval del Pacto, no es el candidato real del petrismo sino que es José Luis Osorio, el aspirante de Independientes y quien fue en 2021 subsecretario de Educación de Medellín.

"Javier Julio Bejarano solo tiene el logo, la marca del Pacto, pero las bases están con José Osorio", dijo Quintero al diario El Universal de Cartagena.

Las declaraciones del exalcalde no cayeron bien en figuras importantes del Pacto Histórico como el senador Alexánder López Maya, quien le respondió duramente al exalcalde de Medellín: "bájele a la arrogancia y al irrespeto, las bases y la dirección nacional de ocho partidos del Pacto Histórico y gran parte movimiento social de Cartagena junto a otros sectores políticos de la ciudad respaldan la valentía y el liderazgo de Javier Julio Bejarano". El expresidente del Congreso y coordinador nacional del Pacto Histórico agregó: "jamás permitiremos capataces que vengan a las regiones a dar órdenes, este proyecto lo hemos construido con humildad y democracia".

Pero el paso de Quintero por Cartagena no fue el único cargado de controversia. También lo fue su visita a Montería, en la que estuvo haciendo campaña por el candidato a la Gobernación de Córdoba, Gabriel Calle Aguas, hermano del presidente de la Cámara Andrés Calle (mismo que lo condecoró antes de renunciar) y miembro de un clan cuestionado en esa región. Los Calle, aunque aliados del petrismo desde la campaña presidencial de 2022, siguen sin tener la confianza de todo el Pacto Histórico por cuenta de su pasado como aliados del grupo político de Bernardo Ñoño Elías, el condenado excongresista corrupto que está en libertad.

Lo mismo ocurre con Jonathan Vásquez, el candidato de Quintero en Barrancabermeja. Vásquez viene de quedar segundo en las elecciones de 2019 y tiene cuestionamientos por cuenta de la supuesta cercanía de su familia con el exalcalde Elkin Bueno Altahona, quien ha gobernado el puerto petrolero en tres ocasiones. Bueno ha sido investigado por lavado de activos, falsedad en documentos, contratación irregular y concierto para delinquir por aparentes nexos con grupos paramilitares. Actualmente también es aspirante a la Alcaldía de Barrancabermeja.

Finalmente, Daniel Quintero llegará a Cali para tratar de darle un empujón a Deninson Mendoza, exgerente de Telemedellin, quien está rezagado en las encuestas respecto a Roberto Ortiz, Alejandro Eder y Danis Rentería. Mendoza perdió la nominación del Pacto Histórico con Rentería (exmilitar cristiano) quedando solo con el débil respaldo de Independientes en la capital del Valle y con una pequeña parte del petrismo. Mendoza tiene varios cuestionamientos a cuestas por cuenta de los onerosos contratos que firmó como gerente (más de 50) con el objetivo de publicitar los logros de la administración de Quintero Calle.

Carlos Caicedo: a apagar el incendio de su partido en Magdalena

En la orilla del exgobernador la cuestión también es de votos. Caicedo logró consolidarse como un fuerte elector del Magdalena y en los últimos tres años gobernó en llave con su aliada Virna Jhonson, alcaldesa saliente de Santa Marta. Para la actual campaña, Caicedo esperaba que su hermana Patricia fuera el reemplazo de Jhonson pero el Consejo Nacional Electoral (CNE) se interpuso en los planes del gobernador y anuló la inscripción de la candidata justamente por el parentesco. Para Carlos Caicedo la decisión del CNE obedece a una "persecución".

"Fuerza Ciudadana lleva semanas sin poder hacer campaña electoral", dijo Carlos Caicedo.

El exgobernador no solo se refiere a la anulación de la candidatura de Patricia Caicedo, sino a la tardanza de la Registraduría de aceptar la inscripción de Jorge Agudelo como su reemplazo. Al partido del exgobernador le quedan apenas dos semanas para tratar que Agudelo, quien no tiene un fuerte reconocimiento en Santa Marta, gane el 29 de octubre y le asegure a Fuerza Ciudadana el cuarto periodo consecutivo al frente de la capital. Las encuestas las lidera el exsacerdote Jorge Ordoñez.

Pero los problemas para Fuerza Ciudadana no solo están en Santa Marta sino también en la carrera por la Gobernación. El ungido por Caicedo es Rafael Martínez, exalcalde de la capital del departamento, quien lidera en los sondeos de opinión y es firme opcionado a reemplazar a su padrino político. Sin embargo, el CNE también podría amargarle los planes a Caicedo y su partido, pues actualmente está en estudio una demanda en contra de su candidatura por presunta doble militancia. Aparentemente Martínez también ha recibido apoyos de candidatos a la Asamblea por el Partido de La U.

Fuerza Ciudadana también tiene decenas de candidatos en otras regiones principalmente en el Caribe.

En este contexto, Caicedo y Quintero optaron por dejar sus cargos para tratar de salvar a la estructura política que les permitiría pavimentar su aspiración presidencial en 2026. Aprovechando un vacío jurídico y capoteando las críticas por no terminar sus periodos, los dos políticos de izquierda se la juegan por ser los nuevos caciques progresistas que tomen ventaja como los herederos del legado de Gustavo Petro.

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