Caracol radio difundió un impactante informe esta semana que, en síntesis, dice lo siguiente: el Ministerio de Minas y Energía publicó y colgó en su página web un documento en el que daba cuenta de los resultados obtenidos luego de analizar 130 contratos vigentes para exploración de gas y petróleo (“Balance de contratos de hidrocarburos y recursos disponibles para la transición energética justa”).
Este informe del cual se estaba pendiente es de la mayor importancia para darle sustento a la tesis repetida por el Gobierno de que no se firmarán nuevos contratos para explorar yacimientos de combustibles fósiles.
Si de este informe se concluía que las reservas son holgadas, no sería tan grave (aunque seguiría siéndolo) que se suspendiera totalmente la firma de nuevos contratos de exploración de combustibles fósiles. Por el contrario: si esta evaluación concluía que las reservas del país son apretadas la idea de suspender la firma de nuevos contratos se torna demencial.
Pues bien: según el informe radial citado las conclusiones fueron maliciosamente alteradas. Se puso a firmar dicho informe a funcionarios que nunca lo conocieron ni lo leyeron (una de ellas la viceministra saliente Ruiz Bellisa); y el informe concluye con sospechosa idoneidad técnica que las reservas holgadas del país están aseguradas. Y que por lo tanto se puede seguir adelante sin problema con el mantra petrista de cerrar los grifos de nuevos contratos de exploración de crudo y gas desde ahora.
El caso del gas es el más dramático: el sospechoso informe colgado en la página web del ministerio concluye que Colombia tiene reservas gasíferas aseguradas hasta el año 2037. Fue por ello que el presidente Petro dijo en Davos, Suiza, que las “reservas” estaban aseguradas hasta 2037-2042; y que quien dijera lo contrario estaba reñido con la ciencia. Con base en el estudio del Ministerio de Minas y Energía el presidente Petro habló y propiamente en Davos de “reservas”, sumando lo que no se puede sumar, o sea reservas propiamente dichas y meros recursos. Un mal estudio llevó al presidente a una peor presentación.
En el informe radial citado se entrevista a varios personajes, uno de ellos al doctor Zamora, expresidente de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, quien desconoce la validez técnica del informe colgado en la página web del Ministerio de Minas y afirma que en el mejor de los casos nuestras reservas de gas son para ocho o nueve años. Es decir, mucho menores de lo que afirmó la flamante delegación colombiana en Davos. Téngase en cuenta que quien esto dice es un expresidente de la Agencia a la que le corresponde autorizar o denegar los contratos de exploración de combustibles fósiles en el país; facultad que no les corresponde desde el punto de vista legal ni al presidente ni a la ministra de Minas.
Vale la pena recordar que ante la avalancha de críticas que suscitó su intervención en el simposio alpino de Davos, la ministra empezó a repetir machaconamente a su regreso al país que los contratos vigentes se respetarían, cosa que no estaba en discusión ni es el punto que preocupa. Lo que inquieta es si se firmarán o no nuevos contratos.
La respuesta a la pregunta anterior se suponía que provendría de la evaluación de los contratos vigentes. Pero para gran sorpresa y malestar, ahora nos enteramos que dicha evaluación fue manipulada por el propio Ministerio de Minas para tratar de darle una simulada credibilidad científica al informe de los famosos 130 contratos, sumando reservas con recursos y contingencias lo que no es técnicamente aceptable.
Muy grave. Ojalá el Gobierno explique pronto este enredo que hasta el momento luce malicioso, salvo mejor explicación de quienes elaboraron el informe.
