El presidente Gustavo Petro le pidió a la Fiscalía investigar a su hermano Juan Fernando. Ocurrió hace dos años, en marzo de 2023, pero no se supo qué pasó, más allá del trino y los titulares. La Fiscalía nunca ha hecho nada. Juan Fernando Petro sigue apareciendo y desapareciendo, ejerciendo influencias y metiéndose en temas en los que deja que la gente se imagine que actúa a nombre del jefe de Estado.
La última gracia de Juan Fernando Petro fue publicada esta semana en El Reporte Coronell. El hermano del presidente acompañado de César Augusto Valencia Mosquera, el emisario del presunto zar del contrabando Diego Marín, alias Papá Pitufo; fue al despacho del entonces director de la DIAN, Luis Carlos Reyes, a pedir que nombraran director de impuestos y aduanas en Buenaventura a John Freddy Restrepo Toro, un funcionario sindicalizado de la DIAN conocido en su mundo con el remoquete de “el burro”.
Buenaventura es el principal puerto del país y un sitio estratégico para el contrabando.
Antes de publicar la información –que había sido confirmada por dos vías– le escribí un mensaje el domingo anterior al hermano del presidente: “Señor Petro, buenas tardes. Quiero hacerle una pregunta adicional (ya verán ustedes por qué le decía que era adicional) ¿recomendó usted el nombramiento de John Freddy Restrepo como director de Aduanas en Buenaventura?”.
Nunca hubo respuesta. Tampoco aceptó contestar preguntas de La W. La información salió al aire y solo entonces, con el escándalo armado, Juan Fernando Petro se dignó enviar un mensaje de voz a la emisora diciendo: “Simplemente la respuesta es que había una reunión colectiva con el sindicato Sintragobernaciones porque ellos requerían hablar con Reyes porque se habían ganado los méritos y unas recomendaciones. Y nos invitaron a esa reunión, en un colectivo para que les reconocieran unas cosas que ellos habían hecho y que todavía no les habían reconocido (…) En esa reunión estuvieron ese colectivo, el doctor Reyes y yo”. No contestó preguntas. Nunca explicó por qué andaba con el emisario de alias Papá Pitufo.
Luis Carlos Reyes, el ministro de Comercio y entonces director de la DIAN, lo contradice. Según él, el hermano de su jefe y el lobista del zar del contrabando fueron juntos a su despacho a pedir el nombramiento. Pero como sea, reunión del colectivo o visita al director, ¿por qué Juan Fernando Petro hace gestiones ante la DIAN?
La semana anterior a la publicación me había comunicado con Juan Fernando Petro en estos términos:
–Señor Petro, quiero preguntarle si conoce al señor Luis Fernando Acosta Osío y si conoce los procesos judiciales en los que él está involucrado.
–Buenos días –contestó el hermano del presidente– no tengo ni idea quién es ese Luis Fernando.
Nuevamente las evidencias están en contra de Juan Fernando Petro. Una cámara de seguridad lo registró, ataviado de gorra y con camiseta negra, caminando detrás de Luis Fernando Acosta Osío, presuntamente involucrado en el mismo intento de soborno a un juez que llevó a la cárcel al senador Eduardo Pulgar.
La imagen fue tomada el sábado 3 de febrero de 2024 y muestra, además, a Juan José Acosta Osío, rector de la Universidad Metropolitana, que junto con el Hospital Metropolitano han sido epicentro de un largo litigio en que la oferta de “doscientas barras” a un juez es uno de los capítulos más sonados.
De acuerdo con un testigo presencial, Juan Fernando Petro llegó al caer la tarde y entró por una puerta trasera a la Universidad Metropolitana de Barranquilla, donde fue registrado por otra de las cámaras.
A pesar de la irrebatible imagen, grabada en el corredor de la rectoría, el hermano del presidente sostiene que no fue a la Universidad sino al hospital:
“Me invitaron a conocer no la Universidad, sino el hospital, que creo que tiene relaciones con la universidad. Porque ese hospital tengo entendido… y lo que vi, porque me lo mostraron en los dos o cuatro pisos que tenía, que ese hospital estaba totalmente caído, sin funcionamiento, creo. Y con un espacio tecnológico moderno, pero completamente perdido. Y esa vaina sí me pareció a mí tenaz. Me decían si yo podía ayudarles a que ese hospital no quedara cerrado o se convirtiera en un elefante blanco. Allá sí fui, al hospital y fui fue con Juan José Acosta, no sé si él tenga algo que ver con la persona por la que me preguntas, pero eso fue”.
¿Y cómo podía ayudar a estos ilustres ciudadanos el hermano del presidente, que es solo un particular? ¿Qué tenía que hacer y a cambio de qué?
Otras preguntas que Juan Fernando Petro dejará sin responder, porque cada escándalo suyo es simplemente olvidado por el paso del tiempo o por el surgimiento de un nuevo escándalo. Ya es hora de que el presidente Gustavo Petro se manifieste sobre las nuevas andanzas de su hermano.
