Un funcionario de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, que fue y sigue siendo el vínculo en la corrupción entre el exdirector de la entidad, Olmedo López, y el exsubdirector, Sneyder Pinilla, continúa contratado por la entidad y firmando desde su despacho.
Lo peor es que esta persona, involucrada en el giro de 1,2 billones de pesos que se perdieron en municipios de Santander, Antioquia y Caldas, no parece estar trabajando por su salario, ya que no le cobra a la UNGRD hace varios meses. Por el contrario, hace todo por seguir teniendo acceso a la contratación, incluso amenazando a sus colegas. Esta es la historia.
El caballero se llama Alexander Angulo Ordóñez y es tan interesante como pintoresco. A sus 40 años, este santandereano técnico en “propagación vegetativa de material genético de cacao”, es una persona que se ganó la confianza de Sneyder Pinilla y Olmedo López. Por eso sigue siendo el flamante coordinador nacional de reasentamientos de la UNGRD. Vamos por partes ya que su paso por la Unidad ha estado envuelto en escándalos desde su inicio. Y repitamos que, como dijo el que no vio el elefante, ahí está y ahí se queda.
Sneyder Pinilla y Alexander Angulo se conocieron en las elecciones locales de 2015, en Sabana de Torres, cuando Pinilla era candidato a la alcaldía y Angulo aspirante al concejo municipal, ambos avalados por el partido Alianza Social Independiente.
Aunque Pinilla fue elegido alcalde de Sabana de Torres con más de 4.000 votos, gracias al apoyo del Clan Aguilar, Ordóñez no corrió con la misma suerte y se quemó, obteniendo solo 92 votos, ya que era militante del partido Comunes, movimiento político de las antiguas Farc. Este datico es importante, entonces guárdenlo por ahí.
Posteriormente, el 1 de marzo de 2018, el señor Alexander Angulo hizo parte de la campaña de 2018 de Olmedo López al Senado, cuando este se lanzó con el hoy presidente Gustavo Petro en la mal llamada lista de “Decentes”. Resultaron más bien incandescentes, porque Olmedo también se quemó a nombre del petrismo, y no logró llegar al Congreso.
De todas maneras, varias fotografías muestran a Angulo abrazado con Olmedo haciendo campaña con el eslogan: “Honradez y Rectitud”. Si le hubieran puesto a esa lista “Hampones” y la campaña la hubieran promovido con la frase “Crimen e Impunidad”, igual estaríamos sorprendidos, pero por el nivel tan profundo de corrupción de lo que han hecho en la UNGRD y la falta de castigo.
Por eso vamos a su ingreso a esa entidad. El 11 de julio de 2023, se firmó el contrato de prestación de servicios No. 9677-PPAL001-652-2023 entre el Fondo Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres y el señor Alexander Angulo Ordóñez. El valor de este contrato, de acuerdo con el presupuesto oficial, era por la suma de 76.560.000 pesos por un plazo de 12 meses.
El 4 de agosto, le pidieron al vicepresidente de la Fiduprevisora agregar el otrosí No.1, para aumentar el valor del contrato en 19.440.000 pesos, dando un total de 96 millones para ser desembolsados en cuotas de 8.000.000 de pesos. El máximo valor que le permitían pagar a una persona que podía acreditar como técnico o tecnólogo. El otrosí no solo le aumentó el valor del contrato, sino que ampliaron los alcances del contratista.
La secretaria general de la UNGRD en ese momento, Ana María Castaño Álvarez, fue la encargada de solicitar a la Fiduprevisora la elaboración del contrato en favor de Alexander Angulo. De hecho, ese mismo 4 de agosto, el entonces subdirector Pinilla dejó constancia de la supuesta idoneidad de Alexander Angulo en los trabajos de reasentamiento y gestión predial de familias en zonas de alto riesgo. Envejeció mal la cartica.
En especial porque el pasado 25 de enero, el coordinador de la Unidad de Riesgos y Desastres se dedicó a promover la narrativa de que los incendios en Cundinamarca y Santander en esa época eran provocados por enemigos del Gobierno, moviendo unos trinos de una ONG, de su propiedad, llamada Refugio Humanitario Internacional. Esa organización, a su vez, estaba promoviendo unos videos sin contexto ni fecha de la teoría de la conspiración. No es la respuesta que se espera de un funcionario de la UNGRD.
Por eso volvamos a su cargo y a sus escándalos. Como su contrato es por Orden de Prestación de Servicios, y no es cargo de libre nombramiento y remoción, el actual director de la UNGRD, Carlos Carrillo, lo único que puede hacer es esperar a que a este funcionario se le acabe el plazo del acuerdo que fue renovado en diciembre pasado antes de que Olmedo López saliera.
En declaraciones al Tercer Canal, el actual director de la UNGRD dijo: “Si fuera libre nombramiento y remoción, el mismo día que me posesioné, lo hubiera declarado insubsistente. Este tipo es el eslabón entre esos dos: es un tipo cercano a Olmedo, que hizo campaña con él en 2018, pero es de Santander y tiene actividad política en Sabana de Torres, de donde es Sneyder Pinilla”.
Cierto. En ese sentido vamos a su nombramiento. Para poder cumplir con los requisitos legales, el señor Angulo expresó tener 189 meses de experiencia laboral con tres empresas. Una de las compañías que le entregó certificación es una organización llamada Cabildo Verde, de Sabana de Torres, Santander.
Según esa organización Alexander Angulo se desempeñó como contratista entre el 8 de febrero de 2011 al 15 de enero de 2012, bajo la modalidad de contrato laboral a término fijo inferior a un año. Después del 1 de abril de 2012 al 15 de enero 2013, bajo la modalidad de contrato de prestación de servicios. Un tercer acuerdo como asistente técnico durante el periodo comprendido entre el 1 de febrero de 2013 al 30 de diciembre 2015 y posteriormente el 1 de junio de 2015 al 30 de diciembre 2017 como coordinador del área social en los proyectos ambientales. No sé si se dieron cuenta, pero las fechas de las últimas dos certificaciones no cuadran. Lo que sí cuadra es el agradecimiento por las cartas.
Cabildo Verde recibió un contrato de más de 700 millones de pesos para una olla comunitaria en Rosas, Cauca. De nuevo, la organización de Sabana de Torres, Santander, que certificó con datos que no coinciden la experiencia de Alexander Angulo, recibió cientos de millones para una olla comunitaria en Rosas, Cauca. Interesante por decir lo menos.
Sigue el descaro. Una fuente de la Unidad que prefiere mantenerse en reserva, confirmó a esta columna que el hermano de Alexander Angulo también trabaja en la UNGRD con otro contrato que no se puede terminar unilateralmente y hace parte de lo que llaman en los corrillos de la entidad, la paradirección de la unidad o la dirección paralela. Es para no creerlo.
Se le conoce así porque, aunque los señores Olmedo López y Sneyder Pinilla están afuera de la entidad confesando sus delitos frente a los medios y la justicia, la estructura vinculada al crimen que constituyeron con estas personas sigue adentro vivita y contratando. Perdón, vivita y coleando.
Dentro de esa organización existen algunas personas que el actual director no ha podido sacar, pese a que se encuentran actualmente secuestrando el gasto y la contratación y otros de los que sí ha podido prescindir unilateralmente. Un ejemplo de los primeros es el abogado Iván Alfaro Gómez, apoderado de Laura Ojeda, esposa de Nicolás Petro, con un contrato actual de 24 millones de pesos al mes.
De acuerdo con la versión que el director Carlos Carrillo ha compartido en los medios, la jefe de la oficina jurídica, Diana Paola Ariza, era la supervisora del abogado contratista Alfaro, pero en realidad se portaba como su subalterna. Según una investigación de Daniel Coronell, en la carrera de firmas de contratos que ocupó las últimas horas de Olmedo López como director, encontraron un certificado de disponibilidad presupuestal por 1.200 millones de pesos.
Las firmas muestran que la suma fue solicitada por la señora Diana Paola Ariza y aprobada por la secretaria general Ana María Castaño Álvarez. ¿Se acuerdan de la que firmó el otrosí del señor Alexander Angulo? La misma, pero ahora más tarde vamos a ella.
Según la columna de Coronell y los documentos que publicó en “El que manda”, en la primera página de la solicitud de ese certificado de disponibilidad estaba escrito a mano el nombre de quien va a ser el beneficiario de los 1.200 milloncitos de pesos: Capstone Group SAS. Esa es la misma sociedad que acreditó, nada más ni nada menos, la experiencia laboral que presentó el abogado Iván Alfredo Alfaro Gómez para poder contratar con la UNGRD. ¿Sí ven el modus operandi? Tú me certificas y yo te contrato.
Continuemos. En esa paradirección también se ha encontrado un señor llamado Henry de Jesús Saldarriaga Pareja, contratista de la unidad y cuyo hermano también contrata con la UNGRD. Saldarriaga Pareja es amigo de toda la vida de Olmedo López e incluso vivieron juntos en Bogotá. Linda pareja de amigos.
Según establecen dos fuentes que hablaron con esta columna, el poco tiempo que pasaba Olmedo López en Bogotá, y no en Uribia donde tenía su corazoncito, se quedaba en el apartamento de Saldarriaga, quien tenía conductor de la UNGRD y era un contratista que en realidad actuaba como un directivo de la entidad, sin tener que firmar nada.
Sobre esta persona, el periódico El Colombiano publicó un artículo identificándolo como un donante de la campaña del representante por el Pacto Histórico, David Alejandro Toro Ramírez. Pues después de su generosidad llegó a la contratación de la UNGRD, con un acuerdo por 284 millones de pesos para prestar sus servicios “altamente calificados realizando acompañamiento financiero, presupuestal y contable al ordenador del gasto del Fondo Nacional de Gestión de Riesgo”. Interesante.
Los registros mercantiles muestran que Henry de Jesús Saldarriaga está relacionado con dos empresas registradas en Cali, llamadas Brand Ads SAS y la Agencia Brands 360 SAS. No confundir con Brand SAS, de la señora Sandra Liliana Brand Pantoja, que es una de las empresas que fue invitada por Olmedo López para participar en el negocio de los carrotanques y se hizo ganadora a otros dos contratos sumando la bicoca de 1.349 millones de pesos.
Sigamos con la paradirección. Una persona clave que apoyó esa estructura es el señor Juan Camilo Pachón Petev, quien fue el jefe de la oficina asesora de comunicaciones de Olmedo López, y fue la joya que sacó el 29 de febrero de 2024 un comunicado de prensa diciendo que el presidente Gustavo Petro seguía apoyando a Olmedo López, pese a que a este ya lo habían echado por el escándalo de corrupción.
Pachón Petev trabajó en el pasado con las empresas de Henry de Jesús Saldarriaga y es la persona que se dedicó a atacar al nuevo director Carlos Carrillo, cuando este tomó la decisión de pedirle la renuncia a la entonces secretaria general, Ana María Castaño Álvarez, por estar involucrada en las acusaciones de contratación.
El pasado 1 de abril, Carrillo la declaró insubsistente, por falta del buen servicio, con la resolución 0300 y se metió en un problema jurídico ya que Castaño se encontraba en estado de embarazo. El 25 de abril, el Juzgado 31 Penal del Circuito de Conocimiento de Bogotá dictaminó que, por esa razón, Castaño debía ser reintegrada a su posición o a un puesto de mayor rango. En su cargo ya estaba nombrado otro funcionario y el único cargo de mayor importancia que ese, es el del director de la UNGRD.
La decisión fue apelada y el pasado 4 de junio el Tribunal Superior de Bogotá anuló el fallo dejando el tema en un limbo jurídico que puede llevar a Carlos Carrillo preso, por desacato, antes que al señor Olmedo López, por corrupción. De fábula.
Dos cosas importantes sobre Ana María Castaño. La primera, es que ella le intentó dar un contrato en la UNGRD a su esposo Sandro Sánchez, pero se enredaron en los detalles finales. No es un dato menor. Segunda, la señora Ana María Castaño despidió a la asesora grado 16 de Olmedo López, aproximadamente una semana antes de que Olmedo cayera en el desprestigio por el escándalo de corrupción. Esa era la asesora de relaciones institucionales de la entidad de nombre Diana Carolina Martínez Joya, y en el momento en que Ana María Castaño la sacó, también estaba embazada. Colorín colorado, este cuento ha comenzado.
Por eso volvamos a Alexander Angulo. Este funcionario, a quien, según fuentes cercanas, Carrillo le pidió que no volviera a pisar la UNGRD mientras se termina su contrato en siete meses, y por eso pasa la mayor parte del tiempo en territorio. El reporte de desplazamientos que ha hecho Angulo entre 2023 y lo que va del 2024 muestra viajes a Cauca, Chocó, Caldas, La Guajira, Cundinamarca, Antioquia, Bolívar, Meta, Atlántico, Santander, entre otros, evidenciando que ha recibido más de 41 millones de pesos en viáticos y comisiones por estos traslados. Eso no es lo importante.
Sus comisiones coinciden con todos los municipios de Antioquia y Caldas donde se hicieron contratos por más de 20.000 millones de pesos que se perdieron, para horas de maquinaria amarilla y volquetas, en donde presuntamente hay compromisos con el señor Alexander Angulo. Al igual que entre septiembre y noviembre de 2023 hizo seis viajes a La Guajira, mismo periodo de tiempo cuando se desaparecieron los recursos en los carrotanques que nunca llegaron y los jagueyes que nunca se hicieron.
Pero vamos más atrás. ¿Se acuerdan de que en 2015 este hizo campaña al Concejo por el movimiento Comunes, partido político de las antiguas Farc? Pues hoy en día, Angulo se ufana de su condición de excombatiente de esa guerrilla, cosa que no tiene nada de malo, y de que no fue firmante del proceso de paz. Ahí sí no tan bueno. Incluso habla constantemente de su pasado revolucionario, de que sus padres hicieron parte de las filas de la guerrilla y, además, según dice, que él continúa en el mundo de la revolución.
Pues esta columna conoció que el señor Alexander Angulo ha amenazado y atemorizado a cuatro personas dentro de la UNGRD, para salirse siempre con la suya, no dejar su cargo y aferrarse a su posición. Las víctimas obviamente prefieren guardar su anonimato por miedo a represalias de este parafuncionario.
Tanto le gusta su trabajo y tan bien le ha ido a nuestro amigo Alexander Angulo en la Unidad que, gracias a un derecho de petición de esta columna, se pudo comprobar que el señor lleva meses sin presentar su cuenta de cobro a la UNGRD. Obvio, porque la plata en este cargo no está en el salario, sino en la contratación que se logre coordinar. Como dice mi profesor de penal: no tengo pruebas, pero tampoco dudas. Pero se le tienen las pruebas.
El certificado de desembolso del Fondo Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, obtenido exclusivamente por esta columna, muestra nueve reportes con los desembolsos que no ha cobrado Alexander Angulo del contrato No. 22409. Los documentos indican que están pendientes de cancelar los más recientes pagos del señor Alexander Angulo porque no ha pasado cuenta de cobro.
Bastante raro que un contratista no cobre su salario mensual, más si se tiene en cuenta que, según lo reportó él mismo en su declaración de bienes y rentas y registros de conflictos de interés de la Función Pública que presentó para entrar a la Unidad, sus ingresos mensuales antes de la UNGRD eran de 1.300.000 pesos, lo que corresponde a seis veces menos de lo que gana actualmente. O infinitas veces menos si se tienen en cuenta la presunta corrupción y los recursos que se perdieron.
Esta columna intentó comunicarse con el señor Alexander Angulo, al igual que con otros mencionados en esta investigación, para tener su versión sobre esta llamativa situación. Al cierre ninguno había respondido las preguntas que les fueron enviadas. Esperemos que no se las tengan que responder a la justicia. O sí. Sobre todo, porque existen las pruebas y definitivamente ya no tenemos dudas.
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